EL PAíS › EL DIRECTOR DE FLACSO ANALIZA EL BALLOTTAGE
“Es un plebiscito sobre Menem”
Néstor Kirchner y Carlos Menem comenzaron a transitar una nueva etapa en sus campañas, de cara al primer ballottage en la historia del país. En su intento por llegar a la presidencia, los candidatos están elaborando diferentes estrategias para atraer el voto del electorado, de acá al 18 de junio. Haga lo que haga, ¿Menem está perdido? A Kirchner, ¿le alcanza con no hacer nada? Página/12 entrevistó al director de Flacso, Luis Quevedo, quien brindó su punto de vista acerca de las fórmulas de uno y otro para lograr sentarse en el sillón de la Rosada.
–¿Cuál es el escenario que usted percibe para el 18 de mayo?
–Primero hay que aclarar que este escenario de ballottage es realmente distinto al de la primera vuelta, y que la decisión que tiene la sociedad en sus manos también lo es. El 27 de abril los votantes tenían un menú de candidatos muy amplio para elegir, y, obviamente, en esta instancia tendrán sólo dos opciones. Pero esto no significa nada más que una restricción. Este ballottage se acerca más a un plebiscito sobre Menem que a una elección entre dos proyectos de país. No es una polarización entre Menem y Kirchner, sino entre Menem y la sociedad.
–¿Qué tiene que hacer Menem para ganar?
–Menem está demostrando su capacidad de hacer política. Está haciendo todo lo posible porque quiere ganar. Para él, el resultado de la primera vuelta significó una derrota, por eso tiene que cambiar. La única posibilidad que tiene de ganar es convenciendo a la sociedad de que no evalúe el pasado y que solamente mire hacia el futuro. La respuesta de la gente hoy es a partir de una evaluación sobre su gestión de los ‘90. Por eso lo está castigando. Menem está haciendo todo lo que puede hacer: cambiar el equipo, presentar un nuevo gabinete y gastar mucho dinero para su campaña. El problema es que no puede correrse, él mismo, del primer plano. Y aunque la sociedad siempre vota con la cabeza, no deja de poner la pasión y la bronca. Y por esa bronca, Menem tiene un escenario muy complicado de torcer. Debe enfrentar a una mayoría de la sociedad que lo único que quiere es sacarlo de la política.
–¿Cree que logrará mantener el porcentaje de la primera vuelta?
–Menem debería retener el 24 por ciento de los votos que sacó en primera vuelta, pero hasta eso le va a costar. Ese 24 estaba formado por intendentes y gobernadores que ya están calculando que apostar a Menem es apostar a perdedor. Una elección digna para él sería perder 60 a 40. Pero yo creo que va a estar más cerca de un 70 a 30.
–¿A Kirchner, entonces, le alcanza con hacer la plancha?
–Me parece que Kirchner está usando la herramienta del voto de la gente. Después de la primera vuelta, eligió aparecer poco públicamente. Sabe bien que tiene la garantía de que mucha gente está esperando votar contra Menem. Kirchner debería trabajar más su relación con la sociedad. No puede perder esta oportunidad de dialogar más con la gente, de desarrollar mejor sus propuestas. Con relación a la comunicación, debería explicitar mucho más su proyecto de país, sin castigar a Menem. No debe subirse a los dichos de Menem, que constantemente van a desmerecer a Kirchner, al Gobierno y a Duhalde. En dos semanas, Kirchner tiene la posibilidad de pasar a ser una figura nacional. El problema de Menem es el 18 de mayo; el de Kirchner, el 19.
Informe: Martina Noailles