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Por un tiempo, el ex fiscal contravencional porteño Mario Atilio Perotti no podrá salir de juerga. Ayer, la Justicia lo procesó y le dictó prisión preventiva, luego de que el miércoles fuera detenido –y destituido– por manosear a una joven en un kiosco del barrio Congreso. Perotti no fue beneficiado con la excarcelación debido a que tenía una causa anterior por amenazas.
El ex fiscal contravencional fue trasladado ayer a una celda individual de la cárcel de Ezeiza. Hasta anoche sus abogados no habían apelado la sentencia. La jueza Mónica Berdión de Crudo, titular del Juzgado de Instrucción Nº 47, lo procesó por los delitos de “abuso sexual y amenazas coactivas”, y le aplicó un embargo sobre sus bienes por 10.000 pesos. La magistrada basó su resolución en los relatos de varios testigos y en los antecedentes de Perotti.
Según dijeron los testigos, después de la medianoche del martes, Perotti, de 56 años, entró borracho a un kiosco –en la avenida Rivadavia 1723– detrás de tres mujeres y apoyó sus genitales contra la cola de una de ellas. Ante su actitud, las chicas reaccionaron. También el hijo de la kiosquera, con quien se peleó a trompadas. Perotti, quien se preocupó por mencionar que era fiscal, quedó con el ojo izquierdo morado. Un inspector de la línea de colectivos 86 observó la pelea y luego se acercó un policía: Perotti le tiró su gorra y lo prepoteó argumentando una vez más que él era fiscal. Luego llegó una decena de policías uniformados y de civil y cerca de las dos de la madrugada fue trasladado a la comisaría 6ª. En la mañana del miércoles se le abrió una causa por el delito de “abuso deshonesto, atentado y resistencia a la autoridad” y quedó detenido en la Alcaidía de Tribunales. Como Perotti, titular de la fiscalía Contravencional 12, había sido designado en 1998 por comisión (y no por concurso, lo cual hubiese implicado su estabilidad en el cargo), el Consejo de la Magistratura lo suspendió en forma provisoria sin goce de sueldo. “No hay un mecanismo específico de remoción de los fiscales designados por comisión y por eso el Consejo de la Magistratura asimiló la situación de Perotti a la de un funcionario del poder judicial”, dijo a Página/12 la secretaria Legal y Técnica de la Ciudad, Alejandra Tadei.
El miércoles, la jueza Berdión de Crudo indagó a Perotti quien, según un secretario del juzgado, “negó todos los hechos”. Ayer declararon seis testigos y la jueza le dictó la prisión preventiva por “abuso sexual y amenazas”. La magistrada le negó la excarcelación por sus antecedentes: desde marzo del año pasado cumplía una probation (que finalizaba en noviembre) en una causa por amenazas.