“Tenemos una sensación de satisfacción muy grande”, celebró Paolo Menghini, padre de Lucas, una de las víctimas de la tragedia de Once, tras la decisión del juez Claudio Bonadío de comenzar el proceso de elevación de la causa a juicio oral y público. Consideró que “se cierra una etapa muy importante”, donde “la instrucción ha sido muy seria, demostrando el contubernio empresarial y de los funcionarios para no invertir y desviar los subsidios”. De cara a la presentación de las acusaciones desde las querellas, explicó que cada familia tiene una postura propia, y que ellos insistirán con el agravamiento de las penas y la incorporación al expediente de la figura de asociación ilícita.

En diálogo con Página/12, familiares de las víctimas mostraron su satisfacción por el rápido avance de la causa que se dirige a juicio oral y público. Menghini expresó que la sensación de “satisfacción” proviene de que haber “acompañado a la Justicia en todo el proceso, expresando el disenso cuando debimos y apoyando cuando estuvimos de acuerdo”. Festejó el resultado del fin de “una etapa muy importante”, donde “la instrucción ha sido muy seria demostrando el contubernio empresarial y de los funcionarios para no invertir y desviar los subsidios”. Planteó que “las pericias técnicas y administrativas son lapidarias” por lo que en la nueva instancia judicial cuentan con “pruebas contundentes” para condenar a todos los imputados. “La causa ha tenido un impulso muy grande en los últimos días y la verdad que esto es muy satisfactorio para nosotros, no lo esperábamos tan rápido”, confesó, aunque aclaró que a pesar de esperar “que esta impronta se mantenga”, no miden “el éxito por la celeridad, sino por los objetivos”. “Tenemos tiempo para esperar que los responsables sean juzgados y condenados como se merecen”, concluyó.

Bonadío les otorgó seis días hábiles al fiscal y las querellas para presentar las acusaciones para el juicio oral. Menghini adelantó a este diario que “en términos generales estamos de acuerdo en cómo seguir, pero puede haber diferencias ya que las estrategias judiciales son más bien familiares”. Afirmó que, por su parte, pedirán nuevamente por el cambio de carátula a “estrago doloso y asociación ilícita”. Con respecto a la situación del maquinista Marcos Córdoba, quien también fue procesado en el fallo de los camaristas de la semana pasada, la mayoría de los familiares creen que tiene parte de la responsabilidad en el choque. Según Menghini, “Córdoba tuvo que detener el tren cuando le dio señales de que andaba mal. Es responsable ya que tenía que parar el tren y no lo hizo”.

Angel Cerriccio, quien perdió en el accidente a su hijo Matías y a su nuera Natalia Benítez, sintió conformidad con el desarrollo de la causa y el procesamiento “nuevamente a Sícaro (Antonio, ex interventor de la CNRT), que había sido sobreseído, y a Córdoba, que la Justicia determinará si tuvo algún grado de culpabilidad”. Opinó que “las pruebas que hay en los peritajes administrativos no dejan ninguna duda de que fueron malversados los montos de los subsidios que fueron para los trenes”, por lo que apuntó contra la ex concesionaria y los funcionarios señalando que “no hay otros responsables, por lógica se cae de maduro que no puedan eximirse de la culpa”. En relación con el envión que tomó el expediente judicial desde diciembre, reflexionó: “No es casualidad, sino que es fruto del esfuerzo que hemos puesto, la prolijidad, el respeto hacia toda la gente con que hemos hablado, tanto periodistas como miembros del Gobierno y de las cámaras de Diputados y de Senadores”.

Además del seguimiento del juicio, los familiares han presentado en el Congreso un proyecto de ley de resguardo de los trenes, que contempla la creación de una comisión bicameral de control y seguimiento de las inversiones en el transporte público. Cerriccio detalló que “se trata de un cuerpo pluripartidario de seis diputados y seis senadores, que además informe periódicamente a los familiares de las víctimas sobre el estado de situación de las inversiones y los resultados de las mismas”. Comentó que “hubo buena recepción desde los distintos espacios políticos”. “Los primeros que tomaron el proyecto fue la gente de la UCR, después Pino Solanas, y ahora lo tomó el Frente para la Victoria.” Afirmó que recibieron “el compromiso de la comisión de peticiones especiales de elevarlo a las comisiones en cuanto empiecen las sesiones ordinarias”.

Informe: Juan Manuel Frías.