Esta medianoche vence el plazo para anotar candidaturas para la conducción del PJ de la provincia de Buenos Aires, en lo que aparece como el primer movimiento partidario de importancia luego de las elecciones legislativas de octubre. Las dudas en el oficialismo son si el gobernador Daniel Scioli aceptará finalmente encabezar una lista “de unidad” como promueven algunos intendentes o si prevalece la idea –que Scioli preferiría– de que sea el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, quien se ponga al frente de esa lista. En tanto, aunque Sergio Massa insiste en que a su Frente Renovador no le interesa participar de la puja, uno de sus referentes, el intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino, confirmó que hoy podría presentar una lista o bien pedir la nulidad de la convocatoria.

Como es usual, será difícil que los interrogantes se despejen hasta último momento. Las internas –ordenadas por la Justicia– serán recién el 15 de diciembre, pero la presentación cierra esta medianoche. Scioli había deslizado la idea de una consulta con la presidenta Cristina Kirchner, pero con el alta todavía tan fresca no se sabía si había podido. La idea del gobernador era despegarse un poco de la pelea bonaerense para comenzar a concentrarse en la pulseada nacional, su gran objetivo de cara a 2015.

“Nunca fue parte de las conversaciones”, aseguraron que dijo Scioli sobre su candidatura los voceros de la gobernación. “Yo estoy en la conducción del PJ nacional”, habría agregado.

Pero varios intendentes –incluso algunos funcionarios y legisladores kirchneristas también– insisten en que su candidatura a la conducción partidaria es la mejor opción para mantener al peronismo bonaerense unido y lejos de los cantos de sirena opositores. En voz baja, aceptan que no quieren ver a Espinoza al tope del PJ de la provincia. Evalúan que si Espinoza consigue sumar al hecho que maneja el municipio de mayor peso en la provincia la conducción partidaria, resultaría casi imposible para el resto disputarle la candidatura a gobernador bonaerense en 2015. Por eso, sostienen a Scioli y prefieren que Espinoza siga como intendente raso.

Otro de los nombres que se había barajado la semana pasada es el del diputado electo e intendente de Loma de Zamora, Martín Insaurralde, ahora suena como posible candidato a presidir el Congreso provincial, otro de los órganos partidarios. En los comicios se elegirán además los titulares de los 135 distritos provinciales.

La semana pasada, el ex intendente de José C. Paz Mario Ishii prometió la semana pasada inscribir su propia lista. Lo hizo acompañado de unas declaraciones extrañas, en las que criticó a Scioli y elogió a Sergio Massa, por lo que no se descartaba un acuerdo con el sector opositor.

A propósito del líder del Frente Renovador, viene insistiendo en que pese a que preside el PJ en Tigre no le interesa la compulsa provincial que buscó descalificar de distintas maneras. Sin embargo, los intendentes peronistas que participan de su armado no piensan lo mismo. Jesús Cariglino –quien en las últimas elecciones legislativas pasó del macrismo a las filas de Massa– adelantó que posiblemente pida la nulidad de las elecciones en la Justicia. “Hay muchas falencias. La primera es que el Congreso a nivel nacional definió que la elección partidaria debía hacerse en todo el país y no de manera separada”, evaluó. También objetó el tiempo de exhibición de los padrones en los que, según Cariglino, “faltan la mitad de los afiliados”.