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El juez federal Ariel Lijo desestimó una denuncia por la contratación directa de un avión utilizado en una gira presidencial en enero de este año. En su fallo, el magistrado juzgó que “no existió por parte del secretario general de la Presidencia de la Nación, Oscar Parrilli, un incumplimiento de sus deberes” al contratar un avión Global Express 700 para el viaje oficial que realizó la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por Cuba y el continente asiático. Al tiempo que consideró que “se acreditó la ausencia de irregularidades en su tramitación y el correcto desempeño del organismo público”.

Lijo afirmó en su fallo fechado el 20 de diciembre que “las autoridades de la Presidencia de la Nación y de la Casa Militar no tenían alternativa de obrar de un modo diferente, y llevar a cabo un proceso diferente al de contratación directa”. Con estos argumentos, el juez federal terminó por desestimar la denuncia realizada por el empresario y eterno candidato porteño Juan Ricardo Mussa, quien había señalado que la contratación de este avión a la empresa Chapman Freeborn para la realización de la gira presidencial por Cuba y Asia se había realizado “mediante contratación directa y sin licitación pública previa, lo que violaría la normativa correspondiente”.

Sobre la contratación directa que motivó la denuncia del empresario y dirigente político ante la Justicia federal, Lijo recordó: “Cuando probadas razones de urgencia o emergencia que respondan a circunstancias objetivas impidan la realización de otro procedimiento de selección en tiempo oportuno, lo cual deberá ser debidamente acreditado en las respectivas actuaciones”.

Lijo también emitió opinión sobre otras cuestiones que mencionaba la denuncia de Mussa que recayó en su juzgado. En ese marco, el juez federal manifestó que “más allá de que en las presentes actuaciones no se encuentre fehacientemente acreditado el hecho de que la empresa Chapman Freeborn realice actividades de explotación de hidrocarburos o algo relacionado con ello en la Plataforma Continental Argentina, lo cierto es que el contrato aquí cuestionado se trató de una contratación de un avión para la gira de la presidenta de la Nación”.