EL PAíS
El rosarino Binner ya empata con los tres candidatos peronistas
Tiene el 36 por ciento de intención de voto a gobernador de Santa Fe. Los candidatos justicialistas –gracias a la Ley de Lemas son tres– suman entre todos el 37,2. El apoyo de Kirchner y de Duhalde.
Por Raúl Kollmann
El intendente de Rosario, Hermes Binner, es de lejos el candidato con mayor intención de voto para gobernador de la provincia de Santa Fe. Sin embargo, como ha ocurrido tradicionalmente, el postulante de centroizquierda está amenazado por el sistema de Ley de Lemas que existe en esa provincia y que le permitirá al peronismo sumar los votos de tres candidatos –Jorge Obeid, Héctor Cavallero y Alberto Hammerly–, lo que por ahora conduce a un empate técnico. De cara a la elección del 7 de septiembre, Binner consigue el 36 por ciento de los votos y los tres candidatos justicialistas el 37,2. Uno de los datos más llamativos es que el gobernador Carlos Reutemann sigue teniendo una altísima imagen positiva –60 por ciento opina bien o muy bien de él–, pero su candidato, Hammerly, sólo consigue el 4,3 por ciento de los votos.
Los datos surgen de la última encuesta realizada por la consultora Ipsos-Mora y Araujo, que lidera el conocido sociólogo Manuel Mora y Araujo. El trabajo es de envergadura, ya que se entrevistaron en sus domicilios a 800 personas de toda la provincia, respetándose las proporciones de edad, sexo, nivel económico-social y distribución geográfica.
Todo indica que en la definición de la carrera por la gobernación santafesina los indecisos tendrán casi la última palabra. Este sector representa hoy el 11 por ciento del electorado, según los resultados de Ipsos. Ahí podrían pesar las imágenes positivas y negativas de los candidatos, entre los que está bien situado Binner, sobre todo porque apenas un 11 por ciento de los santafesinos opina mal de él. En cambio, su competidor principal, Jorge Obeid, tiene una imagen negativa de casi el triple: 29 por ciento.
El pronóstico que registra la encuesta se parece mucho a lo que sucedió en elecciones anteriores. Binner, intendente de Rosario, tiene un enorme peso electoral en el sur provincial, pero todo se compensa con el peso que el peronismo tiene en el norte. El socialista lleva esta vez como candidato a vicegobernador a Miguel Angel Paulón, quien fuera ministro de Producción de Reutemann y revista en el justicialismo. El frente de centroizquierda que se formó alrededor de Binner cree que tal vez Paulón achique las diferencias en el norte. En verdad, la clave del aporte del ex ministro reutemista está en que organice una estructura que le permita al frente de centroizquierda controlar las urnas de las ciudades chicas del norte, ya que siempre se rumoreó que allí se torcían todas las elecciones por el dominio absoluto del aparato del PJ.
En el peronismo, el candidato que lleva todas las de ganar es el ex gobernador Jorge Obeid, un hombre apoyado por Néstor Kirchner y también por Eduardo Duhalde. Ante el coqueteo de Reutemann con Menem en la elección presidencial, Obeid marcó distancias y estuvo más nítidamente con Kirchner. Dentro del peronismo, pero muy lejos, está Héctor Cavallero, quien fuera intendente de centroizquierda de Rosario, pero terminó de la mano del menemismo. Y el tercer justicialista es Hammerly, el hombre de Reutemann.
En la Casa Rosada verían con buenos ojos el triunfo del PJ y en especial el de Obeid. Pero también las relaciones de Kirchner con Binner han sido muy buenas, al punto que el intendente de Rosario le manifestó su apoyo público al santacruceño –siendo de otro partido– enseguida después de la primera vuelta de la elección presidencial. Incluso Binner viajó a Buenos Aires y visitó al entonces candidato en el cuartel kirchnerista, varios días antes que la mayoría de los dirigentes del peronismo que un poco tardíamente se sumaron a los vientos del sur.