EL PAíS › CRUCE DE ACUSACIONES POR EL JUICIO A MOLINE
“La senadora es jacobina”
El kirchnerismo acusa a Baglini de haber impulsado que los radicales no dieran quórum y sospechan la existencia de un juego oculto. Baglini criticó a Cristina Fernández de Kirchner.
Por Felipe Yapur
“Sospecho la existencia de un pacto espurio”, azuzó el presidente de la Comisión de Juicio Político, el diputado justicialista Ricardo Falú. “La senadora (Cristina Fernández de Kirch-ner) es una jacobina que está instaurando el delito de opinión. Arrasa contra todo aquel que opina en contra de ella”, acusó el legislador radical Raúl Baglini. El mendocino es uno de los responsables de que el bloque de la UCR no bajara al recinto el miércoles, provocando la caída de la sesión donde debía comenzar el juicio político contra Eduardo Moliné O’Connor. La comisión que preside Falú aprobó ayer un nuevo dictamen acusatorio contra el supremo tenista.
Para Falú, ese supuesto “acuerdo espurio” que está denunciando fue sellado entre algunos senadores radicales, menemistas y provinciales con el único objetivo de defender a miembros de la Corte Suprema. Para completar su tesis, el tucumano parafraseó al escritor William Shakespeare en la obra Hamlet al sostener que “algo huele mal en Dinamarca”.
Baglini, quien ayer apareció unos minutos en el Senado durante la recepción que realizó el Congreso al presidente chileno, Ricardo Lagos, no habló de la frustrada sesión. Prefirió concentrarse en las causas que lo llevaron a no sentarse en su banca e hizo referencia a las “irregularidades” que se cometieron durante la reunión de la Comisión de Asuntos Constitucionales que preside Fernández de Kirch-ner. Se queja de que el dictamen que emitió la comisión donde se rechaza la recusación que presentó Moliné contra la senadora “tiene la firma de un senador que no estuvo presente”. El senador en cuestión es Jorge Yoma, quien efectivamente no estuvo por encontrarse enfermo. Lo que no dice Baglini es que nada prohíbe la posibilidad de que dicho dictamen sea enviado al domicilio del legislador.
La otra irregularidad que denunció Baglini es el tan mentado cambio del orden del día que realizó Kirchner. “Primero estaba mi excusación y luego la recusación que presentó Moliné”, sostuvo el voluminoso legislador, quien entiende que al cambiar lo dejó sin posibilidad de votar en el planteo contra la senadora porque por nota había anticipado su decisión de no emitir opinión hasta que no se resuelva su excusación. “Es una jacobina”, repitió el mendocino a modo de explicación de su determinación.
Tamaña denuncia no terminó de convencer a senadores del bloque radical, que sostienen que “seis legisladores decidieron la no participación dejándonos a todos como defensores de Moliné”. Ahora hay conversaciones informales entre el oficialismo y la oposición para lograr que el próximo miércoles comience el juicio al supremo tenista con la lectura de la acusación y el informe in voce que realizará la Comisión de Juicio Político, Falú, Carlos Iparraguirre (UCR) y Nilda Garré (Frepaso).
A diferencia de los días pasados, el Congreso vivió ayer una jornada tranquila. Lo único que rompía ese letargo era la adrenalina de los fiscales de las listas que participaron en los comicios del domingo y cuyos votos se recuentan en el Salón de Pasos Perdidos. A la mañana, la Comisión de Juicio Político aprobó otro dictamen contra Moliné. Se trata de la presentación de los diputados radicales Juan Minguez y Hernán Damiani. La causa por mal desempeño se sustenta en una causal que se realizó el año pasado contra el entonces titular de la Corte, Julio Nazareno.
Según los legisladores, durante la sustanciación del juicio pasado, Nazareno en compañía de Moliné citaron al funcionario judicial Alfredo Bisordi a su domicilio particular donde intentaron saber lo que iba a declarar frente a la comisión de Diputados. De todas formas, ayer Falú decidió dar una semana de plazo para sumar firmas al despacho de mayoría y, eventualmente, permitir presentar dictámenes de minoría a los diputados que lo deseen. Una vez superado este tramo, el dictamen llegará al recintopara que tras su aprobación sea incorporado a las causas que ya están en el Senado. Esto podrá ocurrir recién a mediados de septiembre.