EL PAíS
A los palos, con algo de humor y recuerdos de la era menemista
En su semana final, la campaña porteña comienza a citar al fantasma menemista. Al nuevo afiche, se le suma la frase de Ibarra: “No le reprocho haber votado a Menem sino haber hecho negocios con el menemismo”.
El fantasma de Carlos Menem metió la cola en la campaña porteña. A los afiches que identifican a Mauricio Macri con el ex presidente se sumaron las declaraciones de los candidatos. “No le reprocho haberlo votado sino haber hecho negocios con el menemismo”, lo acusó Aníbal Ibarra. “Sigue con el mismo sistema de terrorismo de meter angustia y medio a la gente”, se defendió el empresario.
Como el debate televisivo del jueves fue estructurado y por momentos aburrido, los dos candidatos se dieron el gusto ayer, y cruzaron acusaciones en torno a Menem. “A Menem lo votaron millones de argentinos, casi diría que es un dato irrelevante, lo que sí le reprocho es haber hecho negocios con el menemismo y haber formado parte de un sistema donde él se enriqueció y todo su grupo cuando la Argentina se empobrecía”, señaló el jefe de Gobierno.
“El domingo se vota un modelo de sociedad elitista, en la que la pasan bien los que más tienen o, por el contrario, un proyecto de fuerte compromiso con lo público. Nuestro objetivo es no volver al pasado”, sostuvo Ibarra, que formuló estas declaraciones en un acto en el teatro Margarita Xirgu, donde anunció su programa Deserción Cero y Empleo Joven, acompañado del ministro de Educación de la Nación, Daniel Filmus.
Macri, por su parte, también cuestionó duramente a su adversario. “Estamos viendo la vuelta a la campaña sucia y a la agresión por parte de Ibarra. Está tratando de meterles miedo a los maestros, a los médicos de los hospitales, a los ancianos de los hogares de días, a los tacheros que les dice que voy a hacer una empresa y no va a haber más taxis”, acusó el presidente de Boca.
Además, Macri desmintió su intención de “ponerle límites” a la gestión de Néstor Kirchner si se impone en la Capital. “Nunca vi mi aporte a la política en esos términos, son locuras de alguno que se le ocurrió. Mi aporte en la política lo veo en términos de sumar y no de dividir. No vengo a poner límites a nadie, sino a hacer las cosas bien. Nadie que hace bien su trabajo y consolida un país más ordenado, puede ser un peligro para el Presidente”, explicó.
Finalmente, buscó ubicarse otra vez en el papel de víctima. “No puede ser que cuando se es solamente presidente de Boca se es un fenómeno, se lo invita y se trata de llevarse bien. Pero de golpe porque uno entra en el espacio político con una propuesta distinta, no se puede pasar al extremo de querer definirlo como un delincuente”, se quejó Macri.