Tras los triunfos de Dilma Rousseff en Brasil y Tabaré Vázquez en Uruguay, Daniel Scioli cuestionó a los opositores que en la Argentina proponen un cambio de modelo para el 2015, y advirtió que esas elecciones demostraron que los votantes no se dejan confundir por los candidatos que quieren desandar el camino de la última década. Los resultados, dijo el gobernador bonaerense, “muestran la clara determinación de no querer volver al pasado y de tampoco caer en esa falsa antinomia que alguno quiere instalar de cambio, cambio, cambio. Lo repiten como loros todo el tiempo en Brasil, en Uruguay y acá, y miren la respuesta de la gente cuál ha sido: ‘cambio, cambio, cambio’, ¿cambio de qué?”, se preguntó el precandidato presidencial del Frente para la Victoria.

Y agregó: “El cambio verdadero es sobre lo que hemos avanzado, es encarar la agenda del desarrollo. El cambio son las decisiones que toma a diario nuestra Presidenta, dándole vigor, más protección a nuestros trabajadores, a los sectores más humildes, que necesitan cada vez más del Estado”.

“Esto nos tiene que hacer reflexionar a los argentinos de la importancia de estar unidos para encarar las etapas que se vienen ahora junto a la Presidenta, que está llevando adelante políticas para dejar definitivamente desendeudado al país, social y económicamente, y a partir de allí la gran fase del desarrollo”, concluyó.

También Sergio Urribarri, en carrera como Scioli por la sucesión de Cristina Kirchner por el oficialismo, destacó la victoria del PT en Brasil como una muestra de la corriente de apoyo a la continuidad de los gobiernos populares y consideró que esto se extenderá a las elecciones locales. “Es un muy claro mensaje para los que lucran con el marketing del cambio, con la crítica incesante y el sueño de volver al pasado”, dijo el gobernador entrerriano. En este sentido, consideró que “éste no fue un triunfo electoral más, sino la ratificación del rumbo elegido por los pueblos de América latina”.

Otros dirigentes kirchneristas, como el diputado Héctor Recalde, agregaron que la reelección de Rousseff es “un triunfo de los trabajadores, de los que menos tienen y de todos los que creemos que el desarrollo de Brasil significa para la región profundizar un proceso de inclusión que dé más derechos y aleje al neoliberalismo de América latina”. “Me animo a decir que esta victoria engrandece aún más la figura de nuestro compañero Néstor Kirchner, que iniciara junto a Lula y Chávez un proceso emancipador de nuestra región”, enfatizó Recalde. Además, lo consideró “un justo homenaje a la figura de Néstor al cumplirse cuatro años de su partida”.

En la misma línea, el diputado Edgardo Depetri (FpV) consideró que “con el triunfo de Dilma perdieron la campaña sucia, la mentira y la difamación como estrategia electoral y política”, y pronosticó que “así será en Argentina”.

De igual manera, el diputado Jorge Rivas (FpV) señaló que el triunfo de Dilma y el de Tabaré Vázquez “demuestran que las mayorías populares de la región valoran los proyectos de inclusión, distribución económica, ampliación de derechos y vigencia plena de las libertades democráticas”.

“A pesar de la intensa campaña de los grandes medios de comunicación de masas –agregó–, queda claro que no es posible engañar a nuestros pueblos hasta el punto de que accedan a dejar sus destinos políticos en manos de la derecha, que además de reaccionaria es inepta.”