El gobierno porteño dispuso un aumento del 29 por ciento en el acarreo de vehículos a partir del próximo lunes. El costo por remoción y traslado de autos por mal estacionamiento pasará de 450 pesos a 580. Además se estudia un incremento en los parquímetros de la Ciudad. Los legisladores opositores al macrismo calificaron de “confiscatorio” el aumento a favor de las dos compañías, Dakota y BRD, que tienen sus contratos vencidos desde 2001 y funcionan “de manera irregular”.

La tasa de remoción y traslado de vehículos mal estacionados fue actualizada en febrero pasado, cuando pasó de 350 a 450 pesos. El de este lunes será el cuarto aumento que aplica Mauricio Macri desde que llegó a la Jefatura de Gobierno en 2007. Las concesiones caducaron hace trece años y Macri nunca las revisó.

El vicepresidente de la Legislatura porteña y diputado de Unen, Maximiliano Ferraro, sostuvo que “es inadmisible que se habilite un nuevo aumento a empresas que tienen sus contratos vencidos desde 2001 y funcionan de manera monopólica, irregular y sospechosa”. Además exigió al jefe de Gobierno porteño “que espere a que termine el nuevo proceso de licitación para estacionamiento medido y acarreo” que está en marcha en la Ciudad, “y que fue votado por el PRO y el kirchnerismo”.

El legislador del FIT Marcelo Ramal tildó el aumento de “tarifazo confiscatorio”. “Esta medida beneficiará a dos empresas que se hicieron de este negocio en los tiempos de (Carlos) Grosso y que trabajan hoy con su licitación vencida”. Se trata de Dakota, controladora de STO en el norte de la Ciudad, y de BRD, que opera a SEC en el sur. Para Ramal, “no existe en la Ciudad concesión más parasitaria que la de la grúa”, debido a que “paga un canon fijo, pero sus ingresos crecen al compás de un acarreo de vehículos cada vez más despótico y arbitrario”.

Por su parte, el legislador Alejandro Bodart consideró que se trata de un “curro privado” y “heredado” de Grosso. “Con unos 14 mil autos acarreados al mes, en menos de 9 horas, las dos empresas recuperan el irrisorio canon de 100 mil pesos que le pagan a la Ciudad”, remarcó.

La diputada del Frente para la Victoria Claudia Neira señaló que “el gobierno macrista también les garantiza a las empresas el trabajo de los agentes de control de tránsito”, por lo que “los funcionarios del Estado porteño se convierten en facilitadores de las concesionarias”.

Las empresas se quedan con lo recaudado por el acarreo y se limitan a pagar ese canon fijo al gobierno porteño. Además reciben una partida desde la Dirección de Concesiones que entre 2010 y 2014 superó los 170 millones de pesos por “alquiler de camiones”. Como adelantó Página/12 la semana pasada, Macri también planea darles unas 150 cocheras de las 900 que está construyendo en el nuevo Centro de Convenciones y Exposiciones.

El aumento del acarreo de vehículos se suma a la intención del macrismo de incrementar el valor de los parquímetros y extenderlos por nuevas zonas. “No puede pasar de-sapercibido porque se da en el año en que el Gobierno de la Ciudad pretende inundar de parquímetros los barrios”, sostuvo el defensor adjunto del Pueblo porteño, Claudio Presman. “No sólo se van a enfrentar al problema de no poder estacionar sino que, además, van a tener que pagar y encima tendrán que calcular el tiempo que podrán dejar el auto en la puerta de su casa”, finalizó.