La Cámara Nacional Electoral terminó la ronda de encuentros con partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil para acordar medidas que garanticen la transparencia en las elecciones generales de octubre. Tras recibir en los últimos días a diputados nacionales opositores y a ONG, ayer fue el turno de los apoderados de los partidos. Los de la oposición propusieron prevenciones para que no falten boletas en el cuarto oscuro, mayor capacitación a las autoridades de mesa y la eliminación de los telegramas para el recuento provisorio. El jueves, los camaristas anunciarán qué sugerencias van a ser incorporadas.

Los apoderados salieron de la entrevista de buen humor. “Fue una buena reunión, extensa, en la que se analizaron propuestas concretas. La Cámara va a receptar muchísimas propuestas para transparentar y hacer más eficiente” el próximo comicio, dijo por ejemplo el apoderado del PRO, José Torello. Adrián Pérez, diputado de UNA, habló de su encuentro con palabras similares: “los camaristas se mostraron coincidentes con los planteos”, definió a Página/12.

Incluso desde la propia Cámara Electoral anticiparon que van a impulsar cambios. “Creemos que se va a realizar algún tipo de modificación en los sistemas de control”, adelantó el subdirector general del tribunal, Gustavo Masón. “La Cámara va a proponer unas cuantas modificaciones a la Dirección Nacional Electoral, al Correo Argentino y al Comando General Electoral”.

Una de estas medidas sería el seguimiento de los vehículos que transporten las urnas con un sistema de GPS. Otra, la habilitación de un cuarto de contingencia en cada escuela para garantizar la existencia de boletas electorales de todos los candidatos, y la designación de responsables de escuelas.

Los entendidos apuntan que, en rigor, muchas de las medidas ya estaban tomadas. Por ejemplo, para que en las escuelas haya boletas de contingencia por si faltan en el cuarto oscuro, ya estaba previsto que los partidos puedan aportar al comienzo del acto electoral hasta 350 boletas extra por mesa. También el nombramiento de delegados electorales, responsables de cada escuela que se ocupan de abrirlas y de guardar boletas extras para entregárselas a los presidentes de mesa en caso de ser necesario. En general, se convoca para este rol a las directoras y directores de escuela.

Otra de las preocupaciones planteadas fue la del escrutinio provisorio. Desde la oposición, hubo propuestas de que las actas donde se vuelcan los votos de cada mesa se hagan por duplicado para que quede una copia a los fiscales. Por otra parte, impulsaron la eliminación de los telegramas. En la actualidad, el Correo los redacta con los resultados de cada acta, y con esos telegramas se hace el escrutinio provisorio. De suprimirlos, las actas serían escaneadas y con esa imagen se realizaría el primer recuento. Más allá de la supresión o no de los telegramas, se evalúa poner escáneres en las escuelas para digitalizar las actas. Por otra parte, hubo coincidencias en que la carga de datos del escrutinio provisorio debe ser homogénea, para no dar información tendenciosa.

El apoderado del Partido Justicialista y diputado Jorge Landau (FpV), señaló que desde el oficialismo hay “acuerdo con las distintas iniciativas planteadas por las fuerzas de la oposición”, aunque aclaró a este diario que hicieron “algunos reparos”. Este fue el caso de la propuesta de tener, además de las boletas tradicionales, una boleta única con el nombre de todos los candidatos para el caso de que se produjeran faltantes en el cuarto oscuro. “Usar dos tipos de boleta complicaría el escrutinio definitivo, pero además no está permitido por la ley vigente”, señaló.

“Pero en la mayoría de las propuestas estamos de acuerdo; somos los mayores interesados en que se respete la ley, porque los que ganamos las elecciones somos nosotros”, apuntó.

Para Landau, el seguimiento de las urnas con GPS es una medida posible, hacer, aunque recordó que no ha habido denuncias de robo de urnas. Aplicó un criterio similar al uso o no de los telegramas, ya que la diferencia entre el recuento provisorio y el definitivo no ha mostrado brechas mayores al uno por ciento.

Desde la Dirección Nacional Electoral, su titular, Alejandro Tullio, también consideró que “algunas medidas son posibles e interesantes de apoyar”, y dijo que están trabajando para ver “la factibilidad” de ponerlas en práctica. “En realidad son medidas que ya la Cámara había pensado, pero me parece que la actitud que trascendió es constructiva”.