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Acusado por su ex colaborador Mario Pontaquarto como uno de los destinatarios de los sobornos, el ex presidente provisional del Senado, José Genoud, admitió anoche por primera vez que en el tratamiento de la Reforma Laboral “hubo favores personales” por parte del gobierno de la Alianza. “Yo no creo que haya habido sobornos... Sí algunos favores personales. Hubo una serie de actitudes del gobierno, de (Chacho) Alvarez, nuestras. Hubo ATN (Aportes del Tesoro Nacional) pedidos por algunos senadores para sus municipios, desembolsos para provincias concretas, nombramientos en cargos, embajadas, contratos... “, dijo en una aparición televisiva. Según la confesión de Pontaquarto, Genoud habría recibido parte del dinero que la SIDE usó para pagar las coimas.
Luego de mucho tiempo, Genoud rompió el silencio acusando al ex vicepresidente Alvarez, a quien imputó de haber participado de ese supuesto tráfico de influencias. También calificó como “nauseabundas” las declaraciones de Pontaquarto, un estrecho ex colaborador suyo, y dijo que él no recibió ningún dinero. “No recibí un solo peso y rechazo las declaraciones en su totalidad”, aseguró. En la entrevista a la revista TXT, Pontaquarto dijo que trasladó personalmente cinco millones de pesos de la SIDE en dos valijas y una caja. Según su relato, 4,3 millones fueron a parar a un grupo de senadores peronistas, y los restantes 700 mil se los repartieron Genoud y el ex ministro de Trabajo, Alberto Flamarique.
Compañeros
Todos comparten el título de ex senadores. También comparten el privilegio, que nunca habrían deseado, de haber sido nombrados por el ex secretario parlamentario. Según Pontaquarto, la cordobesa Beatriz Raijer, el rionegrino Remo Constanzo y el entrerriano Augusto Alasino figuraban en la lista que le había dado el salteño Emilio Cantarero como recibo por los sobornos. Ayer, dos días después de que Pontaquarto confesara ante el juez Norberto Oyarbide, los cuatro ex senadores –Raijer, Constanzo y Alasino, más Cantarero a través de su abogado– negaron las acusaciones en su contra. Pero además, Raijer, Alasino y Cantarero consideraron “extraña” la denuncia y se permitieron sembrar dudas sobre la aparición del primer arrepentido en el caso.
De los cuatro ex senadores que hablaron ayer, sólo tres figuraban en la lista que habría recibido Pontaquarto. Se trata de Raijer, Constanzo y Alasino, quienes aparecían junto a Alberto Tell, Julio San Millán, Carlos De la Rosa y José Luis Gioja, flamante gobernador de San Juan. El salteño Cantarero no aparecía en la lista pero igual habría tenido una participación decisiva: según el testimonio de Pontaquarto, Cantarero habría recibido el dinero en su departamento y se habría encargado de la distribución posterior. Ayer, a través de su abogado Andrés Marutian, Cantarero sembró dudas sobre las razones de Pontaquarto para hacer su confesión. “Nos llama la atención la forma en que se produce la aparición del arrepentido”, sostuvo el abogado.
El letrado de Cantarero también dijo que su defendido no tenía cochera en el edificio donde habría recibido el dinero de las coimas. Pontaquarto había dicho a la revista TXT que en ese departamento, de propiedad de Cantarero, se entregaron los millones para repartir entre los peronistas.
“Cantarero no tiene cochera en ese edificio. Por eso creo que habría que ver más allá de las declaraciones a los medios de comunicación, cuál es la real declaración dada por él ante los estrados”, dijo Marutián. Pero aparte del abogado de Cantarero, también hablaron los otros ex senadores. La cordobesa Raijer aseguró que le pareció “muy extraño” que el caso haya vuelto a la atención pública. “Hay gente que está usando este tema por conveniencia propia para ver cómo embroma a otro”, aseguró.
Más intrépido fue el entrerriano Alasino, como corresponde a su condición de ex jefe de la bancada justicialista en el Senado. “Esta es una maniobra política muy importante de Chacho Alvarez y compañía, que está lanzando su candidatura a Presidente de la Nación”, aventuró ayer desde la ciudad de Concordia. Mucho más prudente fue el rionegrino Constanzo, quien señaló que la denuncia de Pontaquarto es “negativa sobre los hechos denunciados en los que se me involucra”. Sin dudas, una declaración sugestiva porque se limita a desmentir sólo las acusaciones contra él, y no dice nada de los demás.