Tras la reunión del viernes pasado con la AFA, la cúpula del oficialismo entró en una cuenta regresiva para anunciar finalmente ayer la aceptación de la rescisión del contrato de Fútbol para Todos. El negociador con los dirigentes de los clubes –entre los que estaba el macrista Daniel “El Tano” Angelici– fue el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, quien también estuvo a cargo de comunicar la decisión y remarcar que van a “tratar de que siga” sin costo. El jefe de Gabinete, Marcos Peña, siguió muy de cerca las conversaciones. En Balcarce 50, sostienen que Mauricio Macri no estaría incumpliendo su promesa de campaña porque “el fútbol seguirá siendo gratuito”.

En rigor, no fue eso lo que Macri prometió. “El Fútbol para Todos va a seguir, pero sin política. La publicidad no va a ser oficial”, sostuvo el líder del PRO en noviembre de 2015 ante las constantes consultas de los periodistas. Era la previa al ballottage y Macri se dedicaba a desmentir las acusaciones de que iba a devaluar y aumentar las tarifas en forma brusca. En diversas oportunidades indicó que Fútbol para Todos seguiría, pero “bajando los costos de producción y sin emitir avisos políticos durante las transmisiones de los partidos”.

¿La razón para tantas dudas? Apenas unos años antes de la campaña que lo llevó a la presidencia, proponía lo opuesto: en febrero de 2013, de hecho, se cruzó con el entonces jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina por ese tema. Macri dijo que eliminaría Fútbol para Todos: “En su momento, el fútbol se organizaba muy bien sin la intervención y la manipulación del Gobierno nacional. Creo que organizando bien el fútbol, y de eso algo puedo decir que aprendí, podemos dedicar muchos fondos a vivienda social, escuelas, caminos, tantas cosas”, sostuvo.

Abal Medina le retrucó en ese entonces: “Macri quiere fútbol para pocos.”

El giro discursivo Macri lo dio en el ballottage porteño del año pasado, el 19 de julio de 2015, hace apenas un año. Allí, ante la sorpresa de sus seguidores, prometió no privatizar Aerolíneas Argentinas, ni YPF, ni las jubilaciones, y aseguró que no eliminaría las AUH ni Fútbol para Todos.

La perplejidad que causó en sus filas forzó a que en los días siguientes circulara un correo con las respuestas que debían dar sus dirigentes ante las preguntas de la prensa. Como informó este diario, entre esas preguntas y respuestas figuraba:

–El fútbol debería ser gratis. No creo que vuelva el fútbol codificado, no creo que nada vuelva al pasado, la Argentina cambió. El fútbol no puede ser mal administrado o usado para fines políticos en un país donde el grueso del conurbano no tiene cloacas ni agua. Hoy al fútbol lo financia el Estado con plata pública, que debería ir a la gente que menos tiene. Hay que trabajar más en profundidad en una mirada integral sobre el fútbol para que sea sustentable y no sea una herramienta política. El Estado puede hacer las cosas bien sin politizar ni mezclar intereses. Hay que discutir cómo.

Más tarde, un segundo correo aclaró: “Por favor, desestimar la respuesta sobre Fútbol para Todos.”

El final

Luego de una extensa serie de reuniones con la AFA, el momento definitivo se produjo tras un encuentro en Casa Rosada el viernes pasado entre De Andreis y Angelici, el vicepresidente de la AFA, Claudio Tapia; Pablo Toviggino, del Consejo Federal de la AFA; Hugo Moyano (por Independiente); Daniel Ferreiro (Chicago), Adrián Zaffaroni (J.J. Urquiza) y Armando Pérez (Belgrano de Córdoba).

Allí, en el contexto de la discusión sobre la Superliga y lo que exigían de aumento al Gobierno, hicieron una oferta que el macrismo no pudo (ni quiso) rechazar. “Nos corrieron con la propuesta de Ted Turner. Eso les disparó una interna entre ellos mismos. El negocio para ellos va a ser vender por afuera”, indicó un funcionario cercano al presidente. En Balcarce 50, advertían que Fernando Marín fue uno de los dirigentes del fútbol que más empujó para rescindir el contrato.

Tras esa reunión con los dirigentes de los clubes y un estudio de los números con sus asesores, De Andreis llevó el planteo de rescindir el contrato a Peña y lo conversaron con el presidente. Macri dio luz verde. “Tienen que mantener el esquema actual de no cobrar adicionales. Si están dispuestos a eso, estamos para rescindir”, le comunicó De Andreis a los dirigentes de la AFA. Si bien faltaba cerrar la letra chica (“No queda claro cómo va a ser este semestre”), queda claro que Fútbol para Todos ya es historia.

“Cumplimos con que el fútbol siga siendo gratuito”, se atajaban en Casa Rosada a raíz de las promesas de campaña. El secretario general de la Presidencia fue el encargado de comunicar la decisión. Dijo que planteará a la AFA que los partidos se sigan viendo por televisión abierta “hasta 2019 sin tener que pagar costos adicionales”. “Los detalles que tenemos que conversar incluyen cuándo concluirá el contrato”, aclaró De Andreis, e indicó: “Nosotros vamos a negociar la rescisión del vínculo hasta 2019, vamos a tratar de que siga sin pay per view”