El abogado de Lázaro Báez pidió ayer nuevamente que se le otorgue la prisión domiciliaria a raíz de un asma que no fue tratado en los últimos seis meses. Maximiliano Rusconi hizo la presentación ante el juez Sebastián Casanello, pese a que los peritos oficiales sostuvieron en un dictamen que Báez tiene varias afecciones, entre ellas asma, pero que está en condiciones de ser atendido en el penal de Ezeiza. Rusconi pedirá la supervisión de un forense de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en caso de que no se conceda la prisión domiciliaria y ya tiene decidido denunciar al Cuerpo Médico Forense (CMF). Báez está detenido hace más de un año cuando el juez Casanello consideró que el empresario estaba viajando en su propio avión sin plan de vuelo. Sin embargo, Báez llegó a San Fernando donde lo esperó una nube de fotógrafos y camarógrafos convocados por el Ministerio de Seguridad. Como había dicho, el constructor iba a cumplir con el llamado a indagatoria al día siguiente en Comodoro Py.