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Como no podía ser de otra manera en medio de la negociación entre la Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el canciller Rafael Bielsa aprovechó su visita a Roma para hablar con funcionarios del gobierno de Italia acerca de la deuda externa. En concreto, Bielsa se reunió con su par italiano, Franco Frattini, para analizar la situación de los ahorristas de ese país que adquirieron bonos del Estado argentino y la posibilidad de crear una comisión técnica bilateral que busque una solución particular para su caso. Un par de horas antes del encuentro, el premier italiano, Silvio Berlusconi, había calificado públicamente de “inaceptable” la propuesta argentina de establecer una quita del 75 por ciento para los acreedores privados (ver aparte), aunque la charla entre ambos cancilleres sirvió para acercar posiciones.
Bielsa llegó el lunes a Roma para dar cumplimiento a una visita que incluye una variada serie de actividades, entre ellas la reunión que mañana a las 11 mantendrá en el Vaticano con Juan Pablo II (ver recuadro), aunque su jornada de ayer estuvo fuertemente marcada por la negociación con el FMI. Además de reunirse con Frattini para conversar sobre ese tema, desde la capital romana Bielsa habló por teléfono en dos oportunidades con Néstor Kirchner y Roberto Lavagna e hizo varios llamados vinculados con las tratativas que desde Buenos Aires piloteaban el Presidente y el ministro de Economía.
Con Washington, Bielsa no sólo se comunicó para dialogar con el embajador argentino en Estados Unidos, José Octavio Bordón, sino también con el propio secretario de Estado de ese país, Colin Powell. Por vía telefónica también estableció contacto con el canciller de Francia, Dominique De Villepin. Otro de sus llamados relacionados con la negociación por la deuda externa estuvo dirigido al embajador argentino en Londres, Federico Mirré.
En su reunión con el canciller de Italia, Bielsa le expresó la “voluntad” del Gobierno de “alcanzar rápidamente un acuerdo satisfactorio” con los tenedores de bonos argentinos de ese país. Los italianos que tienen títulos de la deuda argentina suman unos 300 mil y en la misma Cancillería admiten que por ser tantos constituyen un caso particular. “Son muchos y están organizados. Eso ha llevado a que la relación bilateral entre la Argentina e Italia esté absolutamente teñida por el tema de la deuda”, sostienen. Eso explica también las declaraciones que poco antes del encuentro entre Bielsa y Frattini realizó el propio Berlusconi.
En función de esa situación, lo que buscó Bielsa al cabo de su encuentro con Frattini fue tratar de alcanzar algún tipo de “entendimiento político” que haga que la situación de los bonistas afecte en la menor medida posible las relaciones entre Buenos Aires y Roma. En ese sentido, de la charla entre ambos cancilleres surgió la posibilidad de avanzar en la constitución de una comisión técnica integrada por funcionarios argentinos e italianos que se dedique exclusivamente a la búsqueda de una solución para los tenedores de bonos de ese país, quienes se resisten a aceptar la quita propuesta por la Argentina.
Ese, de todos modos, no fue el único asunto del que hablaron Frattini y Bielsa, quien concurrió a la reunión con el embajador argentino, Victorio Taccetti; el secretario de Relaciones Exteriores, Jorge Taiana; el jefe de Gabinete de la Cancillería, Eduardo Valdés; y el director para Europa Occidental, Alberto Davedere. En la delegación argentina que está en Roma también se encuentran el ministro del Interior, Aníbal Fernández, y el secretario de Culto, Guillermo Oliveri.
Bielsa y Frattini también dialogaron sobre aspectos del acuerdo en materia aeroespacial firmado entre la Argentina e Italia. En concreto decidieron profundizar la integración de los equipos técnicos que trabajan en la creación del Sistema Italo-Argentino de Satélites para la Gestión de Emergencias (Siasge). Además, el gobierno italiano se comprometió a seguir adelante con el acuerdo vigente sobre medio ambiente y cambio ambiental y ratificó el compromiso de dar apoyo financiero para la cooperación en dicho campo. En el área de derechos humanos hubo coincidencias en la importancia de promover su respeto a nivel internacional.
Más tarde, Bielsa continuó su encuentro con los embajadores y encargados de negocios argentinos en Europa oriental, Turquía, Israel y los organismos internacionales con sede en territorio europeo. El objetivo de la reunión con esos funcionarios de la Cancillería –que empezó el lunes y concluirá hoy– es analizar la situación de la política exterior argentina.