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Con el conflicto en Medio Oriente como trasfondo internacional, se realizó ayer en Buenos Aires el acto recordatorio por los 59 años del levantamiento judío en el gueto de Varsovia. En la ceremonia se recordaron a las víctimas del nazismo durante la rebelión, y también hubo críticas a la política belicista del primer ministro israelí, Ariel Sharon.
El 19 de abril de 1943, frente a las deportaciones masivas a los campos de concentración, los habitantes del gueto de la capital polaca se levantaron en armas contra el régimen nazi. “En esta recordación debemos negarnos al silencio frente a lo que asistimos consternados: el ataque a sangre y fuego de barrios palestinos”, dijo ayer en su discurso el historiador Osvaldo Bayer, el orador principal de la ceremonia, que se realizó en el Centro Cultural General San Martín. Y terminó afirmando que “Israel merece la paz para aplicar en beneficio del mundo toda la sabiduría ganada en las interminables persecuciones: no matemos esa sabiduría con el fuego bestial y cobarde de los uniformes”. Aunque finalmente fue muy aplaudido, las palabras de Bayer provocaron el murmullo de un sector minoritario de las 300 personas que llenaron la sala.
El recordatorio, organizado por la Federación de Entidades Culturales Judías en la Argentina, Memoria Activa, Convergencia, entre otras, fue conducido por el actor Héctor Bidonde. Eduardo Slutzky, dirigente de Pymes y otro de los oradores, afirmó que “hoy, en la Argentina, 100 chicos mueren por día por inanición; ésta es una política de miseria y hambre. Frente a esta situación, los países del primer mundo muestran la misma actitud que durante el Holocausto: esperando que el campo esté arrasado para intervenir”. Luego de los oradores, los organizadores anunciaron el inicio de la gestión para construir un monumento en honor a “los héroes de Varsovia”, que se edificará en Parque Centenario. El encuentro fue cerrado por el Coro Popular Judío “Mordoje Guebirtig”, que interpretó canciones de la resistencia en el gueto de Varsovia.