EL PAíS › COOPERATIVAS, MINISTROS, INTENDENTES Y KIRCHNER

Como en un acto de campaña

En Costa Salguero se reunieron 1100 cooperativas de viviendas creadas por desocupados, intendentes de todo el país, tres ministros y el Presidente. Terminó siendo un acto kirchnerista.

 Por Eduardo Tagliaferro

El clima no dejaba lugar a dudas. Se trataba de un claro acto de campaña. Cuadras y cuadras de micros escolares se entremezclaban con unos pocos colectivos de línea. Los números de los ómnibus identificaban su procedencia: el conurbano bonaerense. El evento era el cierre de las Jornadas por la Inclusión Social. Los participantes, los beneficiarios de planes sociales agrupados en cooperativas. Cerca de mil cien cooperativas de todo el país que llevan adelante emprendimientos de obras públicas en unos cuatrocientos municipios. Fue el intendente de La Matanza, Alberto Balestrini, el que mejor definió el encuentro. “Yo venía a hablar de las cooperativas, pero en este marco quiero decir unas pocas cosas”, arrancó Balestrini. Luego presentó al conglomerado que lo escuchaba como la fuerza en la que el presidente Néstor Kirchner podía confiar para enfrentar las presiones externas.
La Jornada había comenzado a primera hora de la mañana. Habían hablado el ministro de Planificación, Julio De Vido, el piquetero Luis D’Elía, el titular de la CGE, Marcelo Fernández, y Bernardo Kliksberg, asesor de Naciones Unidas y la Unesco. Pero el plato fuerte era la presencia de Kirchner. “Yo sé que a algunos les molestan algunas cosas. Prefieren verme de cóctel en cóctel en lugar de venirme a abrazar con ustedes”, comenzó el Presidente, luego de saludar y escuchar durante varios minutos los cánticos de la gente.
El núcleo que a primera vista aparecía como más numeroso estaba formado por miembros de la Federación de Tierra y Vivienda, la agrupación que dirige D’Elía. Con pecheras, con estandartes en los que dominaban las figuras del guerrillero Ernesto “Che” Guevara, de Evita y del inca Tupac Amaru, los militantes de la FTV se entremezclaban con aquellos que enarbolaban las banderas de Hugo Curto, el intendente de Tres de Febrero, o los de José Pereyra, de Florencia Varela.
“Todos estos rostros están golpeando las puertas de la inclusión social, son rostros de trabajadores que nunca más quedarán fuera del desarrollo. Esta es la Argentina de los que no tenían voz en décadas pasadas”, señaló Kirchner. Los rostros y las edades, 30 años promedio, de la mayoría de los presentes ratificaban sus palabras.
Aseguró que no les venía a pedir que lo sigan, “porque ya sabemos lo que nos pasó por seguir y seguir”, dijo sin nombrar a Carlos Menem. No hacía falta, todos sabían de quién estaba hablando. Algo parecido sucedió cuando mencionó a los que “quieren seguir escapándose en helicóptero. Acá estamos nosotros, no van a amilanarnos. No van a atropellarnos”, afirmó. En el escenario lo acompañaban la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; de Trabajo, Carlos Tomada, y el de Planificación, De Vido.
Tapados por los estandartes, el público se dirigía a las pantallas gigantes que traían la imagen del Presidente. Buscando sortear a los encargados de la seguridad del acto, o a quienes se identificaban como seguridad presidencial, intentaban hacerle llegar sus cartas, sus pedidos, y todo tipo de mensajes. No faltaron quienes, en medio de un fuerte chaparrón, intentaron acercarse al helicóptero, en el que pensaron que se retiraría Kirchner. La aeronave no era más que una cuestión distractiva. El Presidente se retiró en un auto oficial.
Antes De Vido había anticipado que “la voluntad del gobierno nacional es crear más cooperativas para derrotar la marginalidad y la desocupación”. Al hablar de estas experiencias, destacó “el ejemplo de intendentes radicales y peronistas que se unen en este proyecto para construir viviendas”. No dudó en calificar al hecho como la transversalidad. “Esa es la transversalidad”, subrayó. Aunque dominado por la liturgia peronista, el acto respetó, como pocas veces sucede, el ecléctico abanico de identidades. No se cantó la marcha peronista y hasta el propio Kirchner terminó su presentación destacando la pluralidad de representaciones. Desde el palco se destacó la presencia de todos los intendentes de Tucumán. La adhesión del intendente de La Plata, Julio Alak; de José C. Paz, Mario Ishi, de los intendentes de: Calilegua, Jujuy, Concordia, Entre Ríos, Colón, Provincia de Buenos Aires, Caleta Olivia, Santa Cruz. Por el Partido Auténtico Federal adhirió Fernando Vaca Narvaja. Las banderas destacaban a agrupaciones de Quilmes, de Moreno, del sindicato de Camioneros, del sindicato de Gastronómicos, del comedor Los Pibes de La Boca. No faltaron los estandartes de respaldo a De Vido, circunscripción 28 de la Ciudad de Buenos Aires, firmados por Raúl Rabanaque Caballero, el otrora dirigente del Partido Intransigente que luego impulsó la recontrarreelección de Carlos Menem y en la última elección al subcomisario Luis Patti. A primera hora de la mañana D’Elía había mostrado su orgullo por “haber dejado los cortes de ruta porque ahora estamos dedicados a la construcción de viviendas y redes de agua potable”. Incluso aventuró que con Kirchner y De Vido “vamos a construir el hombre nuevo”.

Compartir: 

Twitter

Medio gabinete nacional se hizo presente en el acto cooperativista de Costa Salguero.
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.