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“No habrá más caciques, capangas o capataces”, había dicho el ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanian, poco después de su asunción. Y efectivamente, no están más esas virtuales jerarquías sino que entraron en vigencia las de superintendente, comisionado y teniente. Ahora, todos serán “oficiales” y en el barrio al comisario se le deberá llamar “capitán”. Estos rangos son cuatro de los nueve que entrarán tanto en la jerga como en la estructura de la policía de la provincia de Buenos Aires.
El anuncio fue hecho ayer por el ministro que, además, arrancó una sonrisa a sus uniformados cuando les dijo que en marzo se hará efectivo un aumento de sueldo que promedia el 35 por ciento, retroactivo al 1º de enero.
Los nuevos escalafones bajan de 17 a 9 las categorías del personal policial y habían sido propuestos por Arslanian en el marco del Plan de Emergencia Provincial, a horas de su asunción en mayo de 2004. La medida ya había sido difundida en el Boletín Oficial 25089, de enero, pero a partir de ayer se la formalizó públicamente. La iniciativa establece también otro tipo de jerarquización: el educativo. El ascenso de los ex suboficiales ocurrirá si el policía tiene el secundario. Es más, el aumento de sueldo para los cargos menores dependerá de ello. “Aspiramos a que los suboficiales se jerarquicen rápidamente y pretendemos para ello que cumplan en el menor tiempo posible con sus estudios secundarios completos, que serán subvencionados por el gobierno, y con una base de nivelación con el resto de los oficiales”, explicó el ministro.
“Rige hoy una nueva Ley de Personal Policial, la 13.301, que concretó lo que habíamos anunciado tantas veces de reducir la cantidad de cargos del escalafón policial e implementar una nueva fusión –sentenció–. No habrá más oficiales y suboficiales. Borramos así una distinción que hoy no tiene ningún sentido.” Decidido esto, cada uno de los cabo primero, cabo y agente será “oficial” y ganará un promedio de mil pesos. Los sargento primero y sargento se unificarán en “sargento” y ganarán unos 1100 pesos. Los suboficial principal y sargento ayudante serán “subtenientes” y percibirán alrededor de 1300 por mes. Además, los ex oficial subinspector, ayudante y suboficial mayor serán “tenientes” y su sueldo se eleva a unos 1500 pesos. Los que hasta ahora son oficial principal e inspector se convertirán en “teniente primero” con un sueldo de 40 pesos más al anterior cargo. Las comisarías estarán bajo la responsabilidad de un “capitán” (ex comisario y subcomisario) que ganará 2800 pesos. El viejo comisario inspector será solamente “inspector” y su sueldo será de 3800 pesos, mientras que el comisario mayor será “comisionado” y ganará 4580. La máxima jerarquía será “superintendente” (ex comisario general), quien percibirá 7 mil pesos por mes.
El reordenamiento no incluirá el beneficio por antigüedad, por lo tanto el primer aumento pasará a integrar la Caja de Jubilaciones, Pensiones y Retiros de la Policía. La ley no determina que el aumento salarial llegue también al personal administrativo, de servicios generales, profesionales y técnicos, pero el Ministerio de Seguridad decidió un aumento del 20 por ciento para todas esas categorías.
Los anuncios fueron hechos ayer en Lanús, cuando el gobernador Felipe Solá y Arslanian anunciaron los jefes de la nueva Policía Distrital de ese municipio y de Lomas de Zamora y Avellaneda. “No es posible que con la responsabilidad y el riesgo personal que asume cotidianamente el personal policial gane sueldos miserables”, aseveró el mandatario.