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La propuesta de unidad que el congreso del Partido Obrero (PO) ofreció a Izquierda Unida (IU) no fue bien recibida por ninguno de los principales integrantes de la alianza izquierdista. Ni el Partido Comunista (PC) ni el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) consideró viable la conformación de un frente “cien por ciento de izquierda”, como insiste el PO, que también descartó de su oferta electoral posibles alianzas con Mario Cafiero, Alicia Castro y el socialista Jorge Rivas.
“En realidad, la propuesta es cien por cien sectaria”, afirmó Jorge Kreynnes, uno de los encargados del armado electoral del PC. Kreynnes calificó como “testimonial” un frente electoral con las características que pretende el PO, que “mucho menos se convertiría en alternativa al kirchnerismo y a la derecha”. El dirigente comunista también aclaró a Página/12 que siguen las negociaciones con Alicia Castro en Capital y con Mario Cafiero y el socialismo en la provincia de Buenos Aires.
Por su parte, la ex legisladora del MST Vilma Ripoll respondió –en referencia a la propuesta del PO– que “no se puede censurar a dirigentes que están dispuestos a acordar un programa y un perfil de campaña común”. Ripoll defendió la idea de “forjar la unidad con las bases peronistas y con los dirigentes que se fueron del PJ, con los que compartimos luchas todos los días: es un reflejo de lo que habitualmente nos pasa por abajo. Necesitamos ampliar la unidad alrededor de un programa”.