EL PAíS

Cuando se acercaban a un arreglo, Duhalde pidió más

Los negociadores kirchneristas y duhaldistas habían acordado las listas provinciales. Y Chiche se bajaba. Pero luego capotó.

 Por Diego Schurman

Había que ver anoche la cara de Néstor Kirchner cuando se enteró de que Eduardo Duhalde había cambiado sus pretensiones, y en vez de 4 lugares en la boleta de legisladores nacionales comenzó a exigir 9, entre ellos la cabeza de lista de diputados y el segundo lugar de senadores, debajo de Cristina Kirchner. “Se pudrió todo”, fue la frase que repitieron los negociadores de la Casa Rosada, dejando de todos modos un margen para seguir hoy con las negociaciones.
El mal semblante del Presidente tenía que ver con el abrupto cambio de postura de Duhalde, quien venía mostrando vocación acuerdista a través de sus tres negociadores: el jefe de la bancada de diputados del PJ, José María Díaz Bancalari, y los intendentes Juan José Mussi (Berazategui) y Hugo Curto (Tres de Febrero).
Este “Trío Negro” –según el apodo que se ganaron en la Casa Rosada– se reunió ayer al mediodía en el Hotel NH City con el trío de intendentes que representa al kirchnerismo: Alberto Balestrini (La Matanza), Julio Pereyra (Florencio Varela), Alberto Descalzo (Ituzaingó). A esa altura del día, todo marchaba viento en popa.
“Ya está, ya está”, se entusiasmaron en la Casa Rosada. No era para menos. Las listas con los candidatos provinciales –o sea, la primera parte del combo– se había cerrado. Incluso Duhalde dio marcha atrás con su máxima de no incluir a hombres del felipismo. Los ministros Mario Oporto, de Educación, y Norberto Mouillerón, de Trabajo, aparecían postulados por la tercera y la quinta sección electoral.
Fue poco después de que el duhaldismo hizo conocer que a la flexibilidad demostrada en las listas provinciales debía corresponder un gesto similar de parte del kirchnerismo en las boletas nacionales. El ex presidente no tiene problemas –hace rato se lo transmitió al jefe de Gabinete, Alberto Fernández– en que Cristina Kirchner sea la cabeza de la lista de senadores. Pero quiere digitar el acompañante de la primera dama y la cabeza de la boleta de diputados. “Es demasiado”, fue la frase que salió de boca de Kirchner, según reprodujeron quienes ayer conversaron con el Presidente.
En la Casa Rosada tienen para esos lugares sus propios candidatos. A Balestrini se lo ha nombrado en más de una oportunidad para la boleta de diputados, y al ministro de Defensa, José Pampuro, para acompañar a Cristina Kirchner, aunque también está dispuesto a ceder ese lugar a los duhaldistas Díaz Bancalari o Juan José Alvarez.
El malhumor de Kirchner quedó evidenciado en un acto celebrado en el Salón Blanco de Gobierno. “No nos dejaremos extorsionar ni presionar por ninguno de los sectores tradicionales de la política o de otros sectores de la sociedad que ya han trabajado en contra del país”, dijo.
Al término del acto, una maraña de intendentes se trasladó al despacho de Fernández. Hasta allí también se acercó Solá, su ministro de Gobierno, Florencio Randazzo, y el intendente de La Plata, Julio Alak, quienes fueron protagonistas de la firma de contratos para la construcción de viviendas en la provincia de Buenos Aires.
El duhaldismo dejó en claro que Chiche Duhalde nos será un obstáculo para el armado de listas. En todo caso –esto no se dice pero está a la vista de todos–, la mujer representa un elemento de presión del ex presidente para conseguir mayores lugares en el armado de las listas de unidad.
Algunos de los hombres que pulularon por el despacho de Fernández, y al que ingresaba y salía Kirchner, tenían en su mano una fotocopia de la “lista de buena fe”, como titularon la boleta con los nombres de candidatos provinciales de consenso. En la nómina había incluso dirigentes que responden a Balestrini, lo que demuestra que aquella inquina entre el matancero y Duhalde no era razón para trabar el acuerdo.
Anoche, poco después de las 9 de la noche, uno por uno los negociadores se iban a paso firme y con la boca cosida por la explanada de la Casa de Gobierno. Kirchner no sólo les pidió reserva sino también velocidad para rearmar las listas bonaerenses por si Duhalde se mantiene en sus trece durante esta jornada. En definitiva, a partir de hoy comenzarán a correr las últimas 24 horas para presentar la lista bonaerense, la menos conflictiva. Ese plazo deberá respetarse a no ser que se confirme una versión, que circuló anoche, sobre la posibilidad de una prórroga de 72 horas.
Lo mismo podría suceder para Santa Fe, según se informaron Carlos Reutemann y Roxana Latorre. Los legisladores también fueron a ver a Kirchner, de la mano del coordinador general de Asuntos Políticos, Juan Carlos Mazzón. Reutemann planteó las dudas de ubicar a Alberto Hammerly como cabeza de diputados en las listas del PJ santafesino. En cambio, barajaban en su lugar al intendente de Rafaela, Omar Perotti. Hoy seguirá la rosca.

Compartir: 

Twitter

En un acto en el Salón Blanco, ayer, Kirchner fustigó sin nombrar al ex gobernador bonaerense.
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.