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El conflicto de los docentes universitarios llegó ayer a su fin, luego de un acuerdo salarial que significa un aumento de bolsillo del 28 por ciento que se irá aplicando en forma progresiva, hasta julio del año próximo. La negociación cerró un conflicto que llevaba más de 20 días, con medidas de fuerza, movilizaciones y toma de facultades. De las reuniones participaron los sindicatos, el Ministerio de Educación y los rectores de las universidades públicas. El acuerdo prevé el pase al sueldo básico de sumas no remunerativas y no bonificables. El monto de lo que se llama el cargo testigo, es decir el de ayudante de primera con dedicación semiexclusiva, pasará de 456 a 554 pesos. Está lejos, sin embargo, de los 800 pesos que vienen reclamando los sindicatos.
La Federación Nacional de Docentes, Creadores e Investigadores Universitarios aclaró que, a pesar del acuerdo entre las partes, las medidas de fuerza seguirán hasta el lunes, cuando se reúnan en asamblea para discutir los alcances del cronograma pactado. El otro sindicato docente que participó de la negociación, la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu), dijo que tenía mandato de asamblea para aceptar o rechazar la propuesta.
El ministro de Educación, Daniel Filmus, manifestó que con el acuerdo alcanzado “el Estado está haciendo un esfuerzo importante porque cree que la universidad es una herramienta imprescindible para la construcción de un modelo de país desarrollado e integrado”. El acuerdo prevé conformar una comisión integrada por todas las partes, para realizar un seguimiento de todas las cuestiones relacionadas con las condiciones de trabajo, la carrera docente y los adicionales salariales. Otro punto previsto en el acuerdo es determinar la apertura de un cronograma para otorgar un sueldo a los casi 30.000 docentes que trabajan gratis.
Al mismo tiempo, se prometió a los sindicatos el envío al Congreso, este mes, de un proyecto de ley para jubilar a los docentes con el 85 por ciento móvil. “A fin de año, los docentes tenían el 40 por ciento de su sueldo en negro. Con la firma de los acuerdos alcanzados desde marzo de este año, cuando comenzó a conformarse la mesa de negociación salarial, ese porcentaje bajará a un 10 por ciento”, dijo Anahí Fernández, titular de la Conadu. Informó que con el blanqueo del salario docente “las obras sociales tendrán un 35 por ciento más de aportes en julio” de 2006.