EL PAíS › EL SOCIALISTA HERMES BINNER, GANADOR EN SANTA FE
“Lo social es una materia pendiente”
La Ley de Lemas le impidió acceder a la gobernación; ahora fue electo diputado. Rescata a Kirchner, pero marca diferencias.
Por Guillermo Zysman
Desde Rosario
Veinticuatro horas después de haber obtenido una victoria resonante en el tercer distrito electoral del país, donde venció al kirchnerismo por 10 puntos (140 mil votos), Hermes Binner mostró su estilo cauto y mesurado. El ahora electo diputado nacional santafesino consideró que “en líneas generales es evidente que la cuestión social es una materia pendiente, porque el crecimiento económico apenas gotea a los sectores más postergados”. Atribuyó su triunfo a “una serie de variables”, entre las cuales mencionó su gestión durante ocho años como intendente de Rosario y su discurso crítico hacia el gobierno provincial. En diálogo con Página/12, negó estar pensando en las elecciones a gobernador del 2007, anticipó que en el Congreso apoyará las iniciativas positivas del Gobierno y propondrá alternativas a los proyectos en que no coincida. Se excusó de autocalificarse como referente del centroizquierda nacional y dijo descreer de que surja un escenario político con dos bloques por encima de los partidos tradicionales, de izquierda y derecha.
–¿A qué atribuye la victoria: a su gestión como intendente o a su discurso crítico del gobierno provincial?
–Creo que no hay que analizar el resultado a partir de una sola variable. Evidentemente una parte de la población nos acompañó por la gestión que hicimos en Rosario aplicando políticas de inclusión social y de solidaridad. Pero aquí lo que hubo fue un voto a un proyecto colectivo, a la coalición que formamos con el radicalismo, el Frente Grande, el PI y referentes de los movimientos sociales.
–A partir del contundente triunfo del domingo en Santa Fe, todos lo ven nuevamente como candidato a gobernador en el 2007. ¿Es la gobernación una cuenta pendiente en su carrera política?
–Acabo de ser electo diputado nacional y voy a cumplir con las promesas que hice en la campaña. Le aclaro que no tengo ninguna cuenta pendiente en la política, son circunstancias.
–¿Es consciente de que ha quedado instalado como un referente del centroizquierda a nivel nacional?
–Somos conscientes de que Santa Fe necesita un cambio, lo dijimos en la campaña y lo vamos a tratar de implementar en el Congreso. Para nosotros cambio es mejorar la calidad de vida de la gente.
–¿Cómo se comportará en la Cámara de Diputados, será parte de un interbloque con los sectores afines al socialismo, será opositor o aliado del gobierno nacional?
–Me imagino que vamos a trabajar en el bloque del PS, dialogando permanentemente con otros bloques, con las fuerzas que formamos el Frente Progresista. Vamos a apoyar las iniciativas del Gobierno que consideremos positivas y plantearemos visiones diferentes cuando no estemos de acuerdo.
–A nivel nacional, ¿qué análisis hace de las elecciones?
–En líneas generales salió fortalecido el Presidente, que cosechó una importante cantidad de votos en el total (nacional). También es cierto que hubo distritos donde al oficialismo no le fue tan bien.
–¿Por qué razones cree que el kirchnerismo perdió en distritos clave como la Capital Federal y en Santa Fe, aun pudiendo exhibir datos macroeconómicos más que favorables?
–Cada región del país tiene sus particularidades. La gente vota mirando su realidad cotidiana. Pero en líneas generales es evidente que la cuestión social es una materia pendiente, porque el crecimiento económico apenas gotea a los sectores mas postergados. Creo que el Gobierno no está abordando este tema de forma correcta.
–¿Cómo visualiza el escenario político para el mediano plazo teniendo en cuenta la fragmentación del peronismo y la irrupción del kirchnerismo?
–Todos los partidos políticos están fragmentados, no sólo el justicialismo. Las políticas neoliberales aplicadas por el menemismo durante la década pasada degradaron la política y el rol del Estado y esa situación no es fácil de revertir. El sistema político argentino continúa en crisis, la renovación política no se ha completado, pero sin partidos políticos no se puede perfeccionar la democracia.
–Algunos analistas imaginan que en el futuro inmediato surgirán en la Argentina dos grandes bloques, por encima de los partidos políticos tradicionales, uno de centroizquierda y otro de centroderecha. ¿Se imagina articulando el primero de los polos?
–La verdad, hoy por hoy no. Esos son esquemas viejos que ya no sirven. Acá lo que hace falta es innovar, generar algo nuevo, los esquemas sólo encasillan. Hay que tener una mirada amplia para entender que algo está cambiando en la Argentina, ya no se puede plantear la realidad sólo en términos de izquierda y derecha. Hay que trabajar analizando los problemas de la gente sobre la mesa y a partir de allí trazar un plan estratégico entre el sector público y el privado. De allí surgen las políticas de Estado en materia educativa, de inclusión social, de redistribución de la riqueza. El Partido Socialista de Rosario sobrevive precisamente, porque da repuesta a las necesidades de la gente.
–¿Cuál es el secreto del “boom rosarino” que todo el país elogia?
–Bueno, hay que venir a la ciudad, mirar las políticas que se vienen aplicando desde hace años y analizarlas. No hay recetas mágicas que se puedan aplicar de manera automática en cualquier región.
–Teniendo en cuenta la afinidad ideológica que tiene con el Presidente y la construcción política del Gobierno, ¿se imagina en el 2007 siendo candidato a gobernador apoyado por el kirchnerismo?
–A veces las fantasías no sirven para construir la realidad. Hay que tener los pies sobre la tierra. Tenemos que seguir sensibilizándonos cuando vemos a un chico en la calle descalzo pidiendo una moneda. Si pensamos que eso es parte de la geografía urbana, estamos perdidos. Hablar del 2007 cuando hay tantas personas con necesidades insatisfechas puede ser peligroso, tal vez si no nos ocupamos de ellos ahora, no tengan 2007.