EL PAíS › EN MENOS DE UN MES PRESENTARAN UN PROGRAMA BASICO DE ACCION
El ARI prepara diez propuestas
No quieren hacer una de esas plataformas interminables que después nadie cumple, pero quieren mostrar que sí saben qué hacer.
Por José Natanson
En menos de un mes, el ARI realizará un congreso con dirigentes de todo el país en donde por primera vez Elisa Carrió expondrá diez propuestas de gobierno. Aunque no difundirá una plataforma detallada e incumplible estilo Carta a los Argentinos, ni dará precisiones económicas, la diputada chaqueña apunta a un doble objetivo: descartar las críticas sobre su supuesta falta de ideas y avanzar en la construcción del ARI como un movimiento masivo que sostenga su candidatura presidencial.
Hasta ahora, a pesar de la insistencia periodística, Carrió se ha negado a detallar qué medidas aplicará una vez en el poder. Según dice, la incertidumbre actual hace imposible cualquier cálculo. “¿Qué sentido tiene que diga a qué valor quiero el dólar si no sé si cuando asuma va a estar a 4 o a 20, si va a haber reservas o no, si va a haber acuerdo con el Fondo?”, suele repetir la líder del ARI.
Sin embargo, las elecciones anticipadas se perfilan como una hipótesis cada vez más concreta y las encuestas coinciden en ubicar a Carrió como la favorita. En este contexto, la difusión de un proyecto político y económico más preciso aparece como una necesidad urgente.
En el congreso que prepara el ARI, Carrió difundirá diez propuestas: incluyen, entre otras cuestiones, la orientación básica de política económica como “shock redistributivo”, la reforma política y un seguro de empleo y formación. “No queremos caer en los clichés de los partidos tradicionales, que antes de cada elección elaboran planes de gobierno larguísimos que después nunca se cumplen. Pero sí estamos dispuestos a decir a dónde vamos”, explica un legislador cercano a Carrió.
El objetivo es responder a los cuestionamientos sobre la supuesta inconsistencia de su proyecto con un puñado de anuncios que, aunque no incluirán detalles, permitirán hacerse una idea general sobre los planes del ARI. En este línea se incluye, también, la decisión de presentar a Rubén Lo Vuolo como el referente económico del partido.
Pero el esfuerzo de Carrió no pasa tanto por la elaboración de propuestas sino por el armado del ARI a nivel nacional. “No queremos caer en algunos errores del Frepaso, que se concentró casi exclusivamente en la Capital y Buenos Aires, y que nunca definió su modo de financiarse”, explican cerca de Carrió.
La idea es extender el ARI en las diferentes provincias, en un armado lento y trabajoso, que implica visitas constantes de Carrió al interior, pero que resulta clave por una serie de motivos.
- El primero es formal. Aunque en las elecciones del año pasado el ARI se presentó en 17 distritos, lo hizo en alianza con otras fuerzas, como el socialismo, la DC o el PI. Ahora, la idea es constituir el partido en al menos cinco provincias, lo que le permitiría a Carrió presentar su candidatura presidencial.
- La construcción de una fuerza –o “movimiento”, como definen cerca de Carrió– de alcance nacional es un requisito importante para pelear con chances la candidatura presidencial. “La campaña va a ser corta, lo que nos va a ayudar. Nos jugamos al desprestigio de los partidos tradicionales, a la emigración de sus cuadros y militantes. Pero necesitamos una estructura mínima que los contenga”, explica un diputado cercano a Carrió.
- El tercer motivo es instrumental. En el ARI calculan que, para controlar una elección nacional, se requieren unos 80 mil fiscales. Una tarea titánica pero imprescindible, sobre todo si el PJ y la UCR se presentan juntos, como se especula en algunos sectores del Gobierno y del radicalismo. “Una mesa sin fiscales es una mesa perdida. Lo comprobamos en las elecciones del año pasado. En La Pampa, por ejemplo, nos fue bien en las ciudades más grandes, como Santa Rosa y General Pico, pero hubo una diferencia abismal en los pueblos más chicos, donde no teníamos militantes”, comentan cerca de Carrió. Quizá por eso, el objetivo de la chaqueña no pasa tanto por buscar figuras reconocidas (tipo la “pata peronista” que nunca consiguió Carlos “Chacho” Alvarez), sino más bien por cooptar dirigentes intermedios de otras fuerzas políticas: Federico Storani, a quien Carrió jamás aceptaría en su partido, se viene quejando de los supuestos intentos de la diputada por tentar a algunos de los intendentes o legisladores bonaerenses que le responden.
En cualquier caso, para convertirse en una opción real de poder el ARI debe presentar candidatos a gobernadores, intendentes, concejales, diputados y senadores nacionales y legisladores provinciales.
Aunque no hay definiciones, circulan cientos de versiones: muchos dan como un hecho, por ejemplo, la candidatura de Mario Cafiero a gobernador bonaerense, aunque también se menciona a Rafael Romá. La Capital es una incógnita, sobre todo por la distancia cada vez mayor que separa a Carrió de Aníbal Ibarra. En Santa Fe todo indica que el intendente de Rosario, el socialista Hermes Binner, finalmente podría animarse a pelear la gobernación. El resto de los distritos, igual que el nombre del candidato a vicepresidente, aún son una incógnita.
Carrió, por ahora, prefiere no meterse. “Todavía no sabemos cuándo van a ser las elecciones, si las presidenciales van a ser simultáneas con las provinciales, si van a caer todos los mandatos, si se van a elegir todos los cargos o sólo algunos. La prioridad es armar un proyecto y una fuerza política. El resto lo analizaremos después”, concluyen cerca de la chaqueña.