Reconocieron el lugar sin dudarlo. En la casa estilo inglés, ubicada sobre las vías de la vieja estación Azul, actualmente funciona un jardín maternal. Sin embargo, dos ex detenidas la identificaron como el lugar donde estuvieron secuestradas durante la dictadura en 1977. La inspección fue realizada hace unos días y sus testimonios ya fueron presentados en una denuncia realizada por la Secretaría de Derechos Humanos bonaerense, en el marco de la causa que busca sacar a la luz los centros clandestinos de detención que funcionaron durante el terrorismo de Estado en Las Flores, Azul, Olavarría y Tandil.

El resultado de la inspección ratifica las versiones hasta ahora recibidas por la secretaría: en la casa funcionó durante varios años un centro de torturas. Según la abogada de la querella, Cecilia López Uhalde, los testimonios resultan de un valor incalculable por la precisión y claridad con que reconocieron el lugar. “Una de las testigos, no bien subió la escalera, escuchó el ruido de la madera, ingresó a un cuarto y entró en conmoción. En ese momento supimos que estaba reconociendo el lugar. Antes de entrar a la casa dijo que estaba exactamente igual”, contó López Uhalde. Actualmente en el lugar funciona el Jardín Maternal Rubén De Paula. Antes el edificio pertenecía a la vieja estación de Azul, donde el Ejército tenía varias dependencias, lo que despertó las primeras sospechas de que el edificio fue ocupado por los militares durante la dictadura.

“Este es un caso de gran valor, que forma parte de la política que viene manteniendo la Secretaría de Derechos Humanos, apoyando todas las investigaciones que se llevan a cabo en la provincia de Buenos Aires”, señaló a Página/12 el titular de la cartera, Edgardo Binstock, quien además aclaró que se evaluará si corresponde que sobre esas tierras esté funcionando un jardín maternal. La decisión, sin embargo, quedará a cargo de la Justicia, ya que el edificio pertenece a la Muncipalidad de Azul, con lo que el gobierno provincial no tiene jurisdicción allí.

La presentación sobre este centro fue realizada ante el Tribunal Oral de Azul, a cargo del juez Juan José Comparato, en el marco de una causa abierta el año pasado por una denuncia de la secretaría sobre la existencia de varios centros clandestinos. En total se mencionó a seis. Además de la vieja estación de trenes, los lugares identificados fueron la comisaría de Olavarría, la Unidad Regional que tenía la Bonaerense en Azul, la Base Aérea Militar de Tandil, el centro conocido como “La Huerta” que operaba en las afueras de esa ciudad y un campo de Olavarría apodado “Monte Peloni”, que funcionaba bajo las órdenes del Ejército. La Secretaría de Derechos Humanos bonaerense ya había actuado como querellante el año anterior en una causa que permitió identificar alrededor de quince centros en la zona de Campana, Escobar y Zárate. En ese caso no se contaba con ningún antecedente, salvo un testimonio anónimo. Mientras que los campos que fueron denunciados ayer ya figuraban en el informe presentado por la Conadep, sólo que no se había avanzado con las investigaciones para identificar a los responsables que los tuvieron a su cargo. Según reconoció López Uhalde, en el caso del jardín maternal sólo había sido visitado por un sobreviviente que nunca se animó de acudir a la Justicia. “Esto demuestra que el paso del tiempo no es un impedimento para encontrar justicia”, concluyó al respecto la subsecretaria de Derechos Humanos, Sara Derotier de Cobacho.