EL PAíS › REPORTAJE AL DIPUTADO GUSTAVO GUTIERREZ
“El patrimonio de Menem estaría en el fondo Hicks”
El legislador demócrata mendocino fue uno de los investigadores, y descubridores, de las dos cuentas que Carlos Menem tendría en Suiza. Sostiene que los jueces hacen mal los exhortos a sus pares suizos, a propósito.
Por José Natanson
El año pasado, el diputado Gustavo Gutiérrez viajó junto a Elisa Carrió a Suiza para investigar el lavado de dinero. Allí descubrieron las dos famosas cuentas vinculadas con Carlos Menem. En diálogo con Página/12, el legislador mendocino explica por qué los jueces argentinos mandaron sospechosamente mal los exhortos, lo que impide que la información oficial llegue a la Argentina. Además, Gutiérrez cruza las acusaciones sobre enriquecimiento ilícito, los datos obtenidos por la Comisión Antilavado y la información sobre la venta de armas, trazando un cuadro sobre los diferentes delitos que podrían caberle a Menem y sus intentos por evadirlos.
–En junio del año pasado, cuando viajamos a Suiza por la Comisión Antilavado, en menos de 24 horas conseguimos una reunión con el procurador general. Lilita fue con una cantidad de cuentas para investigar. Estuvimos trabajando con el procurador general y con el delegado de la policía financiera. Esto activó un mecanismo interno que tiene Suiza: sin necesidad de un requerimiento de un tercer país, en la medida en que tomen conocimiento de que hay ciudadanos de otros países que han tenido ejercicios de la función pública y tienen cuentas, los bancos tienen que informar. Tomamos la información y la presentamos acá: dijimos que estas dos cuentas existían.
–¿Qué cuentas?
–Una a nombre de Zulema y Zulemita. La otra, una cuenta de una empresa que tiene como apoderado a Ramón Hernández.
–¿Con cuántos fondos?
–650 mil dólares en la primera y unos 7 millones en la segunda.
–¿Menem no figura?
–En la de Zulema y Zulemita, no. En la otra, puede tener firma. Es oficial, pero nos lo dijeron de manera verbal porque para hacerlo oficial tienen que declararlo a la Justicia.
–¿Qué pasó después?
–A partir de esto hubo movimientos para unificar la causa, que estaba en distintos cantones con distintos jueces, hasta que al final lo tomó la Procuración y un juez federal suizo. Lo curioso es que identificamos la misma cuenta por lados separados. La pista de la causa de las armas llevaba al mismo lugar al que llegamos nosotros investigando el lavado de dinero. Cuando volvimos, Lilita y Graciela Ocaña formularon las denuncias.
–¿Y qué pasó?
–Que los jueces hicieron mal los exhortos.
–¿Qué jueces?
–(María) Servini de Cubría y (Jorge) Urso.
–¿Fue a propósito?
–Esa es mi sospecha. Para que funcionen los exhortos, tiene que haber un delito punible en Suiza, de modo que la Justicia de ese país trabe la cuenta o dé la información. Pero los exhortos se hicieron por enriquecimiento ilícito, que es una figura que no existe en la Justicia suiza. Y creo que va a pasar lo mismo con (Norberto) Oyarbide, que mandó las intimaciones a la AFIP, porque para Suiza tampoco es delito la evasión impositiva. Lo que hay que determinar son las figuras penales atribuibles, como sobornos o comisión por contrabando de armas. Hay una figura parecida a enriquecimiento ilícito, pero hay que adaptarla bien. Si no, los exhortos no funcionan.
–Pero, más allá de lo que suceda en la Justicia argentina, la información está.
–Claro, lo que pasa es que al fallar los exhortos es como si la Justicia argentina no se hubiera enterado.
–¿Por qué cree que Menem confesó que tenía una cuenta? ¿Se equivocó?
–Creo que la evaluación que hicieron es que en la cuenta de Zulema y Zulemita no hay delito, y que si lo hay seguramente está prescripto.Blanqueron esa cuenta para tapar la otra, que es donde puede haber algo raro.
–¿La primera cuenta está libre de delito?
–Todo indica que sí. Pero no la segunda. Hay dos hipótesis sobre los fondos de esa segunda cuenta: la primera es que es una cuenta espejo de otra de (Monzer) Al Kassar, donde se depositaron las comisiones de la venta de armas. La cuenta de Al Kassar está comprobada y bloqueada por la Justicia suiza. Incluso se le reclamó a Urso que pidiera a Suiza que le remitiera la causa de Al Kassar, para verificar si coincide con las cuentas de Menem, pero nunca lo hizo. La segunda hipótesis es la denuncia del agente de inteligencia iraní, que dijo que se trató de un depósito para encubrir el atentado a la AMIA. Pero yo creo que la verdad está más en la primera hipótesis.
–Menem dijo que los 600 mil dólares corresponden a la indemnización que cobró por su detención durante la dictadura.
–No es posible. La tasa de interés de los depósitos secretos en Suiza es, como mucho, de un uno o uno y medio anual. El dijo que había cobrado 200 mil dólares. No dan los números.
–¿Se le puede aplicar a Menem la Ley de Etica Pública que obliga a presentar la declaración jurada de bienes?
–Sí.
–El menemismo dice que no, porque la ley fue sancionada cuando finalizó su mandato y porque las cuentas no están a nombre de él.
–Es falso. La ley rige para comportamientos de antes y después de un funcionario. Además, nunca declaró la transferencia de sus fondos a su mujer y su hija. La segunda cuenta pertenece a una sociedad en la que Menem tendría firma.
–¿Se lo puede acusar de evasión impositiva?
–Sí. Pero es justamente lo que está por prescribir, porque las cuentas se abrieron hace tiempo.
–¿Qué deberían hacer los jueces?
–Pueden ir al procurador suizo y activar ese mecanismo interno, como hicimos nosotros. Pueden buscar que Suiza informe al procurador y luego encontrar una figura penal que sea compatible con la suiza. Pero no lo han hecho. Lo que están haciendo es un movimiento para ir detonando causas con los jueces e ir cerrándolas. Desde un primer momento, con el tema armas, tendrían que haber pedido los antecedentes al juez suizo que bloqueó las cuentas de Al Kassar, para ver qué conexión había con esta cuenta. No lo hicieron. Y ahora no mandan bien los exhortos.
–¿Suiza colaboraría?
–Sí, si se mandan bien los exhortos. Lo que pasa es que están haciendo lo mismo que hizo (el juez Adolfo) Bagnasco con IBM en Estados Unidos. Mandó mal los requerimientos.
–¿Cuánta plata tiene Menem?
–No sé. Pero mi sospecha es que el patrimonio de Menem está en manos del fondo de inversión de Tom Hicks. Cuando desaparece el CEI, presidido por (Raúl) Moneta, algunos bienes se quedan en Telefónica y otros en ese fondo de inversión. Mi impresión es que ahí está la plata de Menem.