“Vamos acompañando esta gestión sin que esto signifique una obsecuencia ni ningún punto de fricción”, aseguró ayer el dirigente de la Confederación General del Trabajo (CGT) Juan Carlos Schmid, luego de la reunión de la cúpula de la central obrera. La CGT se reunió una semana después de que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner diera un discurso en el que pidió “ni explotación ni extorsión”, dirigido a empresarios y sectores del sindicalismo. Además, se definió la conformación de una comisión para debatir algunos puntos centrales como “la aprobación de una ley de entidades financieras, de la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central, una reforma integral impositiva, la distribución de las ganancias y del plan para limitar la extranjerización de la tierra”, sintetizó el canillita Oscar Plaini.

“Hemos abordado diversos temas: la evolución de las paritarias en algunos gremios, la situación de las obras sociales y la conformación de una comisión para iniciar una serie de debates alrededor del tema económico”, detalló el dirigente del Sindicato de Dragado y Balizamiento e integrante de la mesa chica que acompaña al líder de la CGT, Hugo Moyano. La reunión había generado expectativa ante la posibilidad de que se expida sobre el reclamo de la Presidenta, pero sin embargo se continuó con el perfil bajo sobre el tema. El titular de UPCN, Andrés Rodríguez, indicó que “como institución obrera nunca hubo un exceso o una cuestión que ponga en peligro la marcha de la economía”, aludiendo a las críticas presidenciales realizadas la semana pasada en la localidad bonaerense en José C. Paz.

Después de que CFK realizara el llamado de atención a sectores del sindicalismo, en el que apuntaba a las formas de protesta de los gremios –señaló puntualmente a un sindicato que provocó la cancelación de vuelos de Aerolíneas Argentina y Austral–, la CGT mantuvo cierto silencio en dar una respuesta sobre el tema. Si bien algunos dirigentes explicaron que “Cristina no señaló a la CGT”, otros interpretaron que “se trató de un llamado a la reflexión a todos los gremios”, como lo indicó ese día Schmid a Página/12. Aun así, la organización de trabajadores no emitió una posición oficial sobre el cuestionamiento.

“Está en marcha un modelo económico que ha permitido recuperar terreno social y nosotros creemos que el apuntalamiento y la garantía de todo eso se logra efectivamente con la mayor presencia de dirigentes sindicales en todos los estamentos”, destacó Schmid en referencia a la participación sindical en las listas electorales de octubre. Por eso el sindicalista calificó como “legítimo” el reclamo que impulsan desde la central obrera para que dirigentes del sector gremial integren las listas del oficialismo para los próximos comicios.

Uno de los puntos que se acordaron en el encuentro de la conducción cegetista fue la creación de una comisión que impulsará debates con representantes de las cámaras de diferentes sectores para analizar la marcha de las principales variables económicas y su impacto en el proceso electoral. Plaini explicó que coincidían “con el Gobierno en que hay que profundizar el modelo y que se viene una próxima etapa, por eso la ronda donde nosotros queremos tratar temas que son fundamentales”.