Aunque todavía no le llegan las condenas, el dictador Jorge Rafael Videla seguirá cumpliendo prisión preventiva en una de las causas que lo tienen como imputado. La Cámara Federal confirmó la orden de detención por el secuestro extorsivo de los empresarios Federico y Miguel Gutheim (padre e hijo) durante la dictadura. El tribunal ratificó la decisión tomada en primera instancia por el juez federal Norberto Oyarbide, quien investiga esta causa que también involucra al ex ministro del interior Albano Harguindeguy y al ex ministro de economía José Alfredo Martínez de Hoz.

Videla cumple prisión domiciliaria por la apropiación sistemática de los hijos de desaparecidos y en la causa sobre la Operación Cóndor. La sala II de la Cámara desestimó el recurso del defensor de Videla y recordó que el delito que se le atribuye al ex comandante de la primera Junta Militar está considerado como de “lesa humanidad”.

Los camaristas Horacio Cattani y Eduardo Freiler afirmaron que el monto de la pena previsto para el delito imputado a Videla y la “objetiva valoración de las características de los hechos y las condiciones personales del imputado permiten sostener que (en libertad) intentará eludir la acción de la justicia”. El tribunal recordó que en la causa, iniciada en mayo de 1985 por la Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas, Videla fue procesado por el delito de secuestro extorsivo, pero resultó indultado por el decreto 1002/89 durante la gestión presidencial de Carlos Menem.