“Lamento no haberlo acompañado en tan merecido reconocimiento, pero mis responsabilidades institucionales hicieron que me encontrase en esta oportunidad presidiendo la sesión del Honorable Senado de la Nación”, se excusó por carta el vicepresidente Julio Cobos. Su presencia había sido anunciada por el alfonsinismo y confirmada desde el propio entorno de Cobos. Pero lo que el oficialismo no pudo lograr al no enviarle la invitación oficial lo consiguió en el debate de la ley de movilidad jubilatoria, al rechazar el pedido de cuarto intermedio solicitado por los legisladores radicales. En el texto, el vice elogió “las banderas de la justicia, la igualdad, la paz, la libertad y el pluralismo” a las que Raúl Alfonsín “consagró su vida y su lucha”. El vínculo entre Cobos y Alfonsín se pronunció después de que el vice visitara al ex presidente en su casa para conocer su estado de salud. En aquel momento, Cobos consiguió el aval del alfonsinismo para que sea levantada su expulsión de la UCR. De puño y letra, el vicepresidente finalizó su carta “con distinguida consideración y el mejor de los afectos”.