Uno de los objetivos planteados por el informe de la Ucep aparecido ayer es “atender con mayor agilidad y eficiencia a los reclamos ingresados”, por lo que no sorprende que establezca un patrón de prioridades para ordenarlos. “Una vez recibido el reclamo, se lo ingresa a nuestro Stock Acumulado de denuncias según el grado de conflictividad”, explica el documento. Los calificados de “urgente” son de carácter “inminente” y provienen de funcionarios de gobierno y directores de las comunas. Quizá por eso, en un e-mail, contenido en los CD que tiene en su poder la Justicia porteña, se lea de parte del encargado de seguir los reclamos que llegan desde la Jefatura de Gabinete: “Los de HRL tienen prioridad 1”(por las iniciales de Horacio Rodríguez Larreta). La segunda categoría es “alta” y se refieren a situaciones de “conflictividad y alto riesgo”, sin especificar más. Los de “media” advierten “menor numerosidad de usurpadores en el espacio público”. Mientras que los de “baja” son de escaso grado de “conflictividad y riesgo poblacional”. El escalafón termina con los reclamos de “rutina”, ya que “los indigentes vuelven a intrusar la zona”.