Por primera vez en su historia, el PAMI reconoció ayer como afiliada a una mujer que está casada con otra mujer. La que obtuvo ese derecho fue Ramona Arévalo, esposa de Norma Castillo, quien ya figuraba como beneficiaria de la obra social de los jubilados. Norma Castillo, activista de 100% Diversidad y Derechos y presidenta del Centro de Jubilados LGBT Puerta Abierta a la Diversidad, se casó con Ramona este año, en un Registro Civil de la ciudad de Buenos Aires.

La afiliación de Arévalo fue posible en el marco de la ley de Obras Sociales que contempla, entre otros puntos, la afiliación directa al cónyuge del titular. Esta iniciativa, que fue llevada adelante con la activa participación del presidente de la organización 100 % Diversidad y Derechos, Martín Canevaro, se concretó en la sede central del Pami, con la presencia de su director ejecutivo, Luciano Di Cesare.

Norma y Ramona se casaron el 9 de abril pasado en la ciudad de Buenos Aires y el matrimonio fue el primero del país entre dos mujeres.