“Quieren jugar, tomen, juéguense por la democracia”, le comentó uno de los asistentes al acto a otro interpretando el anuncio de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner del envío de un proyecto de ley sobre Papel Prensa al Congreso. El ambiente fue de seriedad primero y júbilo después, cuando Fernández de Kirchner ya había finalizado el discurso en el que presentó el informe de la venta de la empresa papelera durante la dictadura, titulado: “Papel Prensa: La Verdad”. Estuvo presente todo el gabinete nacional y representantes de las Fuerzas Armadas, además de artistas, políticos, algunos empresarios y personalidades de la cultura.

“Se está poniendo a la luz pública la sistematización de los negocios que el Estado de facto organizaba con algunos sectores empresariales”, aseguró a Página/12 el ex diputado Edgardo Depetri, ahora subsecretario de Relaciones con la Sociedad Civil. El marco de la presentación del informe sobre Papel Prensa que se realizó en el Salón de los Patriotas Latinoamericanos de la Casa Rosada aparentaba seriedad y mesura hasta que la Presidenta comenzó a desgranar algunos de los comentarios parafraseando los titulares de algunos matutinos involucrados en el informe. El salón se encontraba repleto de invitados al acto, pero también fue notoria la ausencia de algunos empresarios. Respondieron al convite Osvaldo Cornide, de la CAME; Oscar Lascurain, de Adimra, y Carlos De la Vega, de la Cámara Argentina de Comercio. La Unión Industrial Argentina, que conduce el empresario Héctor Méndez, anunció horas antes, a través de un comunicado, que había resuelto no asistir.

Entre los presentes se destacó por la luminosidad de su vestido la diputada María Laura Leguizamón. Blanco intenso con un collar plateado, Leguizamón resaltaba entre tanto traje oscuro y corbata. Uno de los que recibieron mayor cantidad de saludos al ingresar en el salón fue el flamante titular del PJ bonaerense, el camionero y también secretario general de la CGT Hugo Moyano, que llegó acompañado del dirigente Omar Viviani y se sumó al judicial Julio Piumato, completando la presencia sindical cegetista. En el recinto se pudo ver a personalidades de la cultura como los actores Andrea del Boca y Gastón Pauls, las cantantes Teresa Parodi y Susana Rinaldi y el cineasta David “Coco” Blaustein.

Del espacio Carta Abierta –integrado por intelectuales y artistas afines al Gobierno– se encontraba el filósofo Ricardo Forster y el ex vicerrector de la UBA el arquitecto Jaime Sorín. “Es fundamental que salgan a la luz casos como éste para que la sociedad pueda entender la dimensión de lo que pasó durante la dictadura”, dijo el ex decano de la Facultad de Arquitectura de la universidad porteña. En los balcones de los dos pisos superiores que daban al salón se podía ver a los trabajadores de la Casa Rosada –mozos, personal de limpieza y de otras dependencias–- atentos al discurso de la Presidenta. Los diputados Juan Carlos Dante Gullo, Carlos Kunkel, la presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, y Taty Almeida, de Madres Línea Fundadora, y los legisladores Juan Cabandié y Francisco “Tito” Nenna también se encontraban entre los asistentes.

El presidente de la Federación Argentina de Municipios, Julio Pereyra, escuchaba atento apoyado sobre su moderna computadora tablet de última generación y unas sillas a su derecha se encontraba el intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto. Con el brazo derecho enyesado, la secretaria de Integración Nacional, María del Carmen Alarcón, se sentó cerca de Abel Fatala y el titular de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde. “Es el Nunca Más de la complicidad empresarial con la dictadura”, señaló al finalizar el anuncio el secretario de Relaciones Parlamentarias, Oscar González.

Sentado sobre el sector izquierdo del salón, cerca del retrato del sacerdote salvadoreño Romero, el dirigente social Luis D’Elía observaba con atención el discurso de la representante estatal en Papel Prensa, Beatriz Paglieri. “La Presidenta realizó un relato conmovedor para contar la otra historia e hizo una apuesta fuerte en la que fortalece a la democracia involucrando a los tres poderes en este caso”, aseguró D’Elía a este diario. Ya consumido el acto, afuera los bombos de la Unidad Básica Pueblo Peronista le ponía el condimento popular matizando el final con bombos y batucada.