EL PAíS
Una propuesta de Sabsay
¿Cómo lograr que, si se renueva la Corte Suprema de Justicia, sus integrantes no sean otra vez manejados por el poder político de turno? Consultado por este diario, el abogado constitucionalista Daniel Sabsay aportó una idea. “Podríamos imitar el sistema de designación de Estados Unidos”, dijo. Y explicó que allí “los nombres de los nominados surgen de colegios de abogados y de magistrados de asociaciones cívicas y organizaciones de derechos humanos. Ellos proponen una lista y el poder ejecutivo decide”.
En la Argentina, en cambio, los nombres los propone el Poder Ejecutivo y el Senado les presta o no acuerdo. La ventaja del sistema estadounidense, en el que hay audiencias públicas para tratar los pliegos de los candidatos, “es que los postulantes vienen legitimados de entrada desde la sociedad”, explicó Sabsay, quien opinó que así “tienen menos tendencia a dejarse presionar por el poder político porque no sienten que les deben un favor”.
Eso sí: para que se sigan todos los pasos formales, es importante que la nómina se difunda entre la gente con el suficiente tiempo como para que los legajos puedan ser estudiados y, eventualmente, objetados.