Distintas fueron las caras que mostró el sindicalismo en el acto político que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner encabezó en la cancha de Vélez. Mientras la Central de Trabajadores de Argentina (CTA), conducida por Hugo Yasky, se mostró como parte integrante del kirchnerismo, gremios de la CGT fueron por separado y su secretario general, Hugo Moyano, no fue de la partida.

“Este acto marca la cancha. De un lado los que queremos una Argentina para todos y del otro los que piensan que podemos ser una republiqueta entregada al capital extranjero”, señaló el secretario general de la CTA, Hugo Yasky, al finalizar el acto en el estadio José Amalfitani. Después de un pequeño impasse en la relación con el Gobierno durante la paritaria nacional docente, la CTA volvió a mostrarse dentro del armado kirchnerista. Acompañando a Yasky estuvo el dirigente de los docentes bonaerenses Roberto Baradell.

En contrario, la CGT, una aliada principal del modelo iniciado por el ex presidente Néstor Kirchner en el 2003, estuvo entre los grandes ausentes. El dirigente de los judiciales, Julio Piumato, indicó por la mañana que a la organización gremial “no la invitaron”, razón por la que el líder de la CGT no asistió al encuentro. A pesar de la falta de invitación, sí asistieron distintos gremios por separado y algunos de sus dirigentes. Se vieron banderas de la Uocra, del gremio de los taxistas que encabeza Omar Viviani, seccionales de UPCN y del Sindicato Argentino de Televisión.

Sin embargo, en el palco se pudo ver a dirigentes de la CGT que se acercaron de forma independiente. El dirigente de los bancarios Eduardo Berrozpe, Horacio Ghilini, de los docentes privados, y Ricardo Barbeito, de molineros, se encontraban entre los invitados en la escena central. Estos gremialistas que militan en la CGT emitieron un comunicado en el que señalan la necesidad de avanzar en “la profundización del modelo, ya que aún resta mucho por realizar y consolidar”, a la vez que expresaron su más “firme respaldo” a los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.

Una ausencia notoria fue también la de la Juventud Sindical, que participó con fuerte presencia en el acto de Huracán del año pasado. El diputado y líder de ese espacio juvenil sindical, Facundo Moyano, en medio de la relación tirante entre su padre y la Presidenta, twitteó ayer: “Imponente convocatoria de CFK. Con diferencias seguimos apostando a la profundización”.