EL PAíS
Apostillas matanceras
- “Victoria.” Enormes letras, bien grandes, sobre un decorado celeste que decoraba todo el escenario. Convocada como cábala, la palabra “victoria” reinaba por sobre todos los demás símbolos del acto: el escudo peronista, las imágenes de Perón y Evita y la bandera argentina. Debajo del palco, en tanto, se veían los nombres de los barrios, localidades y dirigentes que habían movilizado al acto: “Agrupación Sentimiento peronista, KirchnerFelipe Solá-Balestrini”, “Agrupación Eva Duarte, La Matanza”, eran las más visibles, y convivían con pancartas de Lanús, Quilmes, Florencio Varela, Moreno, Ituzaingó, Avellaneda, San Fernando.
- “Somos incorregibles.” Balestrini tenía que hablar primero. Así estaba agendado. Pero, como llegó tarde, tuvo que empezar Solá. Cuando terminó el gobernador, Balestrini se quitó la campera de gamuza y encargó hacia el micrófono. Comenzó citando a Borges (“Alguien dijo alguna vez que los peronistas somos incorregibles”) y rápidamente pidió disculpas por su poca puntualidad. “Yo soy incorregible, siempre llego tarde”, admitió. Luego se ganó la primera gran ovación de la noche, que le propinó su gente, y para cargar contra Menem recordó que “en La Matanza, en la última década, se perdieron 100 mil puestos de trabajo”. Finalmente, entre petardos y fuegos artificiales, se dio el gusto de decir “Bienvenidos a la capital del peronismo de la provincia de Buenos Aires”.
- Baila para todos. Había terminado el discurso de Kirchner. Había terminado de sonar la marcha peronista. Entonces comenzó a escucharse la canción “Tren del Cielo”, de Soledad. Bien delante del palco, Kirchner comenzó a seguir el ritmo con las piernas y luego empezó a bailar, aunque tímidamente. Unos pasos atrás, su esposa Cristina Fernández lo miró y se rió mientras lo señalaba con el rostro. Al lado de la senadora, estaban Chiche Duhalde, Quindimil y la “colorada” Teresa Solá. Unos minutos después, la propia senadora bailaba la pegadiza canción junto a la esposa del gobernador bonaerense, que hizo gala de una destacable destreza.
- A no enterrarse. “No nos volvamos a enterrar en el mismo pozo, del que tanto nos costó salir”, dijo Scioli para referirse a Menem y a su modelo “del pasado”. El ex motonauta dirigió su discurso a los “jubilados, los trabajadores y los independientes”, y prometió respetar la universidad pública, hacer abrir las fábricas y aumentar las jubilaciones.