- Radicales también. Encendido, Ricardo Gil Lavedra dijo: “Queremos que se persiga a los funcionarios corruptos”. “La Argentina es campeón mundial de causas pendientes, desde los ’90”, como los ex funcionarios menemistas Alberto “Kohan o (Víctor) Alderete”, continuó. El kirchnerista Carlos Kunkel lo interrumpió: “Aguad”, gritó. “Sí, todos”, contestó Gil Lavedra consciente de que había incorporado a la lista de sospechosos al diputado de su bancada Oscar Aguad, al que le reabrieron una causa por el destino de 60 millones de dólares cuando era interventor de la ciudad de Corrientes.

- En guerra. “Explique las guerras del partido de gobierno con la CGT y con la provincia de Buenos Aires”, soltó la belicosa Patricia Bullrich dirigiéndose al jefe de Gabinete. “Es una discusión interna como se da en cualquier partido democrático del mundo, pero de guerra absolutamente nada”, contestó Abal Medina.

- Carteles. El bloque radical decoró sus bancas con carteles que hicieron propios distintos reclamos. “Coparticipación, no al ajuste a las provincias”; “Ciccone ¿quién es el dueño?”; “Crisis energética, la pagamos todos”, “Glaciares, inventario ya. Agua=Vida”, y “Suba de las asignaciones ya”, decían los afiches preparados para enfrentar cámaras y flashes.