- Banqueros. Carlos Heller cruzó a Felipe Solá –quien le dijo que debía “borrarse de la discusión por presidir un banco que compite con el Ciudad”– y lo acusó de ser “el vocero” de Mauricio Macri y el presidente del Banco Ciudad, Federico Sturzenegger, quien públicamente aseguró que debía excusarse del debate. Entonces Heller leyó una carta del propio Sturzene-gger, en la que le agradecía su intervención y su conocimiento para que el oficialismo entendiera que no se podía quitar ahora todos los depósitos judiciales al Banco Ciudad.

- Insulto. Felipe Solá argumentaba que las tasas del Banco Nación para créditos personales eran mucho más altas que las del Ciudad, cuando el diputado oficialista y ex director del Nación Fabián Ríos le cuestionaba a viva voz la veracidad de sus datos. “Que me pida una interrupción”, sugirió Solá molesto, pero Ríos prefirió no seguir la polémica. “A que no me pedís la interrupción, sos un cagón”, desafió Solá alterado.

- Camión. Los diputados opositores dejaron el recinto y subieron al acoplado que sirvió de escenario para la protesta que frente al Congreso realizaban los trabajadores del Banco Ciudad. “Esta es la prepotencia del poder kirchnerista que desfinancia a todos los porteños”, dijo desde allí el radical Ricardo Gil Lavedra. “Estos proyectos insólitos no son contra Macri, sino contra empleados y vecinos”, sumó el cívico Alfonso Prat Gay.