La presidente CFK puso en posesión de sus cargos a los nuevos jefes de los estados mayores de las Fuerzas Armadas: Luis María Carena (Estado Mayor Conjunto), César Milani (Ejército), Gastón Fernando Erice (Armada) y Mario Miguel Callejo (Fuerza Aérea). Callejo es el menos conocido de todos ellos. Dos menciones sucintas a él se encuentran en los diarios del ex provicario general castrense, Victorio Bonamín, que serán publicados próximamente. Los diarios están depositados en el archivo de la Comisión Bonaerense por la Memoria, y realizaron la investigación el licenciado en historia de la Universidad Nacional del Centro de la provincia de Buenos Aires Lucas Bilbao y el estudiante avanzado de sociología de la Universidad Nacional de La Plata Ariel Lede. En noviembre de 1975, Bonamín había viajado a Italia para participar en la Peregrinación Militar Internacional. El día 20 escribió: “Acto penitencial en la plaza San Pedro ¡lo cierra el Papa! Mis dos ‘acólitos’: los Cadetes Carlos Aníbal Antonietti y Mario Miguel Callejo, que lloró cuando vio al Papa”. El 7 de marzo de 1976 volvió a mencionarlo en su diario: “Con los Capellanes Astigueta y Tadeo en la iglesia de la Guarnición Militar (Aviación). Llevo las homilías para los Alfereces ‘peregrinos’. Está el querido Mario Callejo, el que lloró en la noche de San Pedro”.