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Por F. Y. y E. T.

Cada día que pasa, el gobierno de Eduardo Duhalde se debilita aún más. Esto se traduce en el aceleramiento de las disputas internas que se expresan a cara descubierta en el Congreso. Ayer, por caso, una quincena de diputados del PJ presentó un proyecto que establece la caducidad de los mandatos de la Cámara baja en los próximos comicios generales para elegir presidente y vicepresidente de la Nación y exhorta al Senado, a los gobernadores y el resto de las legislaturas provinciales, a adherirse. La iniciativa no cuenta con el aval de la conducción del bloque, por lo que se especula que representa un virtual quiebre de la bancada, tal como lo señaló uno de los legisladores que impulsa el proyecto.
El tucumano Ricardo Falú es el autor de la iniciativa y lo acompaña un ecléctico número de legisladores entre los que figuran el mendocino Arturo Lafalla, el santafesino Julio Gutiérrez, los santacruceños Sergio Acevedo, Mónica Kuney y Omar Canevaloro; los bonaerenses Alberto Coto y Ricardo “Lolo” Gómez; la entrerriana Blanca Osuna; la tucumana Stella Maris Córdoba y el porteño Gerardo Conte Grand.
Falú aseguró que “la crisis de la Nación reconoce varias causas y una de las sustanciales es la política derivada de la conducta de los dirigentes, carentes hoy de legitimidad social”. Por eso, agregó el tucumano, “es necesario crear las condiciones adecuadas para establecer las bases de una nueva organización nacional”.
Acevedo, quien a pesar de los deseos de la conducción de la bancada del PJ juega junto a Falú un activo rol en el juicio político a la Corte Suprema, indicó que “la propuesta fue largamente discutida por los diputados que firmamos el proyecto. Y la llevamos al recinto porque queremos saber quiénes están a favor de esta verdadera renovación política”.
Si bien ayer la Cámara de Diputados se encontraba prácticamente vacía porque no había sesión, la presentación del proyecto despertó igualmente las primeras repercusiones. El duhaldista rabioso José María Díaz Bancalari dijo estar de acuerdo con lo presentado por sus colegas pero, por si acaso, puso reparos jurídicos con respecto a la viabilidad de implementarlo a través de un proyecto de declaración. El ARI, el bloque que preside Elisa Carrió, dio en cambio un fuerte respaldo y prometió participar de la sesión especial del próximo martes. Desde los bloques de los partidos provinciales todavía hay dudas. Los radicales por ahora sólo se comprometieron a estudiar el caso.
Por ahora nadie quiere aventurar las posibles consecuencias que puede tener este proyecto en la bancada. Pero todo indica que al presidente del bloque, Humberto Roggero, le será difícil resolver esta crisis en puerta, sobre todo si se tiene en cuenta que durante la reunión de Duhalde con los gobernadores en La Pampa, el presidente de la Cámara baja, Eduardo Camaño, pidió la expulsión del bloque de los legisladores considerados rebeldes.
Este grupo no fue el único que promovió un proyecto sin el consentimiento del bloque. Ayer al mediodía, los menemistas presentaron un paquete de proyectos que incluye el adelantamiento de las elecciones para fin de año, la modificación a la Ley de Acefalía y la implementación de internas abiertas simultáneas y obligatorias. Uno de sus objetivos es dar por fenecido el mandato de Fernando de la Rúa, que constitucionalmente finaliza en diciembre de 2003, para que Carlos Menem pueda presentarse en los próximos comicios si es que se realizan antes de esa fecha. La interna está desatada.