A pesar de ser lunes, a pesar de la altura del año y de que en el Congreso el telón comienza a caer lentamente, los cambios del gabinete de Néstor Kirchner no pasaron inadvertidos para propios y extraños. Más para los extraños, ya que es precisamente en el Parlamento donde la oposición tiene algún peso, algún espacio y, aunque simbólico, cierto predicamento. De todos los anuncios, lejos, sobre el que más se habló fue el recambio de Felisa Miceli por Roberto Lavagna en el Ministerio de Economía. En este punto y en diálogo con este diario, tanto la oposición como el oficialismo tuvieron la misma opinión. El jefe de la bancada radical en el Senado, el mendocino Ernesto Sanz, dijo que “el Presidente eligió ser su propio ministro de Economía”. El jefe del bloque oficialista, el rionegrino Miguel Angel Pichetto, destacó que “la nueva etapa tendrá el rasgo del Presidente”. Más allá de esta coincidencia, la derecha, incluido el duhaldismo, mostró un discurso en el que se preocupó por lo institucional. Desde los sectores del denominado progresismo, casi todos se mostraron satisfechos por los nuevos nombres.
- Ernesto Sanz, presidente del bloque UCR en el Senado: “Lavagna construyó hacia el exterior jerarquía. Algo importante cuando se trata de reinsertarse en el mundo. Hacia los sectores internos había logrado una importante confianza. El Gobierno arrancó mal. No sé si el reemplazante podrá construir estos dos parámetros”.
- Rodolfo Terragno, senador radical independiente: “Lavagna ponía límites a las intromisiones presidenciales. Kirchner no sabe de economía, pero tiene una gran autoconfianza y una extraordinaria vocación de mando. Eso puede llevar a que la Economía sea manejada en definitiva por él y esto constituye un gran peligro”.
- Hugo Storero, diputado nacional de la UCR: “El cambio de Lavagna es un grave error. En un momento en el que hay un brote inflacionario y en el que el Banco Mundial había cuestionado severamente la transparencia en la utilización de los planes sociales y la contratación de las obras públicas, la separación de Lavagna compromete la seguridad jurídica”.
- Eduardo Macaluse, titular del bloque del ARI en Diputados: “El recambio se produjo en el peor momento. Fue irresponsable de parte de Lavagna, que huye en su momento difícil, y fue irresponsable de parte de Kirchner, que tiende a concentrar el poder en una sola mano. Se está pareciendo a un gobierno de la provincia de Santa Cruz. Kirchner entendió el mensaje de las urnas como un cheque en blanco que creemos que la sociedad no está dispuesta a otorgar”.
- Claudio Lozano, diputado nacional, CTA: “En pocos días veremos si el cambio replantea el rumbo de la economía o, simplemente, expresa un capítulo más en la estrategia de derrotar y desplazar liderazgos justicialistas alternativos al presidente de la Nación. Miceli cuenta con las condiciones para afirmar la estrategia de reindustrialización y redistribución justa de los ingresos que nuestro país necesita”.
- Ariel Basteiro, diputado nacional, socialista: “Cuando veo que la derecha se preocupa por algunos de estos nombramientos, empiezo a ver que estos cambios son positivos e importantes. El de Jorge Taiana (en Cancillería) es el nombramiento más lógico y tendría que haber sido canciller antes, no por desmerecer a (Rafael) Bielsa. A pesar de que hay muchas cosas que no comparto con (Nilda) Garré, no la considero parte del enemigo y en cuanto a (Juan Carlos) Nadalich, trabajó bien en su provincia y es una persona preocupada”.
- Rubén Giustiniani, senador nacional, socialista: “Conozco a Nilda Garré desde hace muchísimos años y la considero una dirigente política destacada, que seguramente desempeñará muy buen papel en el Ministerio de Defensa. Las Fuerzas Armadas insertas en el sistema democrático deben también profundizar cambios internos, como la eliminación de los anacronismos del Código de Justicia Militar”.
- Patricia Bullrich, Unión por Todos: “Con los cambios, Kirchner busca protegerse a sí mismo. Plantea una política en donde sólo hay espacio para su gente. No hay ninguna apertura ni a otros partidos políticos ni al justicialismo. Miceli me parece muy alineada con Kirchner y sin un programa propio. Igual que Taiana, Nadalich y Nilda Garré. Creo que van a venir tiempos difíciles”.
- Federico Pinedo, diputado nacional por el macrismo: “Es lógico que Lavagna se vaya si no comparte la política del Presidente. A partir de ahora creo que hay que investigar los hechos de corrupción denunciados por el ex ministro. Se produjo una pingüinización del gabinete”.
- Graciela Camaño, diputada nacional duhaldista: “Lamento profundamente la renuncia del ministro de Economía, Roberto Lavagna, porque creo que el país se pierde una persona que ha demostrado capacidad absoluta en el momento de mayor crisis que vivió la Argentina. Por ello hoy hay que estar más atento que nunca a cómo sigue la economía en la Argentina. Lavagna, más que nadie, tenía en claro qué hacer para salir de este estancamiento”.
- Adrián Menem, diputado nacional por La Rioja: “Kirchner echó al ministro de Economía porque nadie puede pensar diferente y si alguien opina distinto sufre las consecuencias, como le pasó a Lavagna. Habrá que esperar cuáles son los pasos de la nueva ministro”.