EL PAíS
La mirada de Amnistía
Amnistía Internacional está siguiendo de cerca el juicio en Córdoba que tiene como acusada de calumnias e injurias a Sonia Torres, la abuela de Plaza de Mayo que busca al hijo de su hija Silvina Parodi, desaparecida en 1976. Y para eso nombró como observadora de las audiencias a Verónica Reyna, una abogada que trabaja en Chile por los derechos humanos. “Estamos muy preocupados porque si ella llegara a ser condenada, sería un preso de conciencia, porque está siendo juzgada por emitir una opinión y sobre un antecedente que es de dominio público”, señaló Reyna a Página/12. “Sería preocupante que la Justicia trate de silenciar a la abuela en su búsqueda de justicia”. La abogada de Amnistía ha presenciado, desde el martes pasado, cada una de las audiencias del juicio oral. “El Tribunal me ha dado toda la facilidad, uno se da cuenta de cómo sienten el peso y la categoría del proceso que están llevando, teniendo en cuenta que se trata de un juzgado correccional donde la pena es de hasta tres años”, analizó.
“La de Sonia es la historia de muchas mujeres que han sufrido las dictaduras que asolaron a América latina en los ‘70”, afirmó y recordó que en Chile “estamos viviendo la apertura de muchos procesos por la búsqueda de desaparecidos y ya hay alrededor de 80 militares procesados por secuestro calificado”.