EL PAíS › MATZKIN Y BAUZA SE REUNEN HOY PARA NEGOCIAR POR LAS INTERNAS
Con Menem amenazando acudir a la Corte
Pese a los cuestionamientos, los decretos de convocatoria a elecciones internas que firmó el presidente Eduardo Duhalde siguen vigentes, por lo tanto, mañana la Justicia electoral cumplirá con el cronograma y repartirá a cada partido un padrón general. Sin embargo, ni el Gobierno ni el menemismo descartan la posibilidad de llegar a un acuerdo en esta semana. El punto de consenso giraría en torno de la llamada “variante De la Sota”, es decir, que se les impida votar a los afiliados a los partidos políticos que el 24 de noviembre no vayan a internas. Para explorar esta posibilidad, el ministro del Interior, Jorge Matzkin, recibirá hoy al operador menemista Eduardo Bauzá.
Pero mientras trabaja con sigilo en una negociación, en público el menemismo sigue presionando. El ex presidente Carlos Menem advirtió que está dispuesto en recorrer todo el camino judicial hasta llegar a la Corte Suprema en su impugnación a los decretos. Y reiteró cuál es su posición: “Que todos los partidos simultáneamente vayan a internas y que en cada uno de los partidos puedan votar los independientes”.
Actualmente, la impugnación presentada por un grupo de dirigentes menemistas está en manos de la jueza federal María Servini de Cubría. En estas cuestiones, la posición de Servini ha sido históricamente esperar que sea la política la que resuelva cómo se vota y no que lo hagan los jueces a través de una resolución. Aparte, dicen cerca suyo, la interna que está en juego la pone en una situación delicada. “Si falla contra los decretos van a decir que ayudó a Menem, si los confirma dirán que se puso del lado de Duhalde”, razonaba un amigo de la jueza. Por eso, Servini se tomó con mucha calma el trámite de la causa: recién ahora le está enviando el expediente al fiscal para que se expida.
El mayor obstáculo que hoy esgrime el Gobierno para hacer una elección como la que pide Menem es la complejidad que exigiría el operativo. Primero, porque habría que hacer un padrón diferente para cada interna, excluyendo a los afiliados a los otros partidos, al que se sumaría un listado con los independientes. Después, porque hay que disponer de tantas mesas y urnas como partidos voten. En cambio, explican en la Rosada, si se hicieran como dicen los decretos con un padrón general, los partidos podrían votar en la misma mesa. Alcanzaría con que cada votante elija en el cuarto oscuro una boleta del partido en el que desea participar de la interna. El recuento se hace por separado.
Con pocas horas por delante hasta que se ponga en marcha el cronograma electoral, algunos dirigentes menemistas creen que llegó la hora de ser más flexibles en sus posturas. Uno de ellos es Bauzá, el operador del ex presidente más contemporizador con la Rosada. El ex senador se encontrará hoy con Matzkin para reanudar una negociación contrarreloj. Lo complicado es que no hay punto que se resuelva con sencillez. Para poner un ejemplo, a los menemistas les irritaba que la alternativa de consenso ya se la conociera como “variante De la Sota”, porque no le quieren regalar ningún poroto a su rival. Así que si el acuerdo transita por ahí, habrá que rebautizar la enmienda que prevé que los afiliados a algún partido que ese día no va a internas porque tienen candidato único no puedan participar de la elección de ningún otro. Por esta misma razón, Matzkin fue a diputados y se reunió con el presidente de la Cámara, Eduardo Camaño, y el jefe del bloque, Humberto Roggero: quieren evitar la fractura de la bancada.