[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

Los argentinos Santiago Loza, realizador del film Extraño, y Ulises Rosell, director de “Bonanza”y codirector de El descanso, son dos de las seis promesas del cine mundial elegidas por el Festival de Cine de Cannes para residir a partir de marzo en París, donde trabajarán becados en sus nuevos proyectos de largometraje. La elección de Loza y Rosell para esta confirma el interés que los organizadores del festival depositan en el cine argentino. Ya habían becado en 2001 a Lucrecia Martel, directora de La ciénaga, y en 2002 a Diego Lerman, autor de la premiada pero aún inédita Tan de repente.
“Fuimos elegidos entre cineastas del mundo para desarrollar nuestros guiones”, contó ayer Santiago Loza, director de Extraño (su nombre original era “Grieta”), película protagonizada por Julio Chávez y Valeria Bertuccelli que competirá en el Festival de Cine de Rotterdam (Holanda), que comienza el 22 de este mes. Rosell, quien prevé estrenar en salas argentinas su documental “Bonanza” –sobre una familia que vive en condiciones primitivas cerca de La Plata– antes de viajar a Francia, permanecerá cuatro meses en una casa ubicada en una zona muy tradicional de París, junto a Loza y los otro cuatro directores elegidos. Son de Sri Lanka, Marruecos, Australia y Corea.
“Voy a trabajar un guión sobre el título de una canción de Luca Prodan, “Teléfonos que suenan en habitaciones vacías’, pero la película no tiene que ver con esa canción aunque se hable de ella”, adelantó Loza, de 31 años y oriundo de Córdoba. “Es una película coral de mujeres de 25 a 40 años que tratan de sobrevivir en la Argentina cuando parece que la posibilidad de subsistencia es imposible. Es una película sobre la resistencia y la fe.” Por su parte, Rosell, quien ahora se prepara para filmar el piloto de una serie de documentales televisivos sobre resonantes casos policiales, que serán producidos por Gastón Portal, dijo que su proyecto “es sobre un pibe de 15 años que es arquero y se enamora de una mujer mucho mayor que él”. “Es una historia intimista y familiar”, señaló Rosell.