ESPECTáCULOS
La memoria de Solanas
Fernando “Pino” Solanas, quien fue premiado anteayer por el presidente Néstor Kirchner, aseguró que su documental Memoria del saqueo, que se estrenará el jueves, “ayudará a golpear las conciencias de la gente y contribuirá a entender” la crisis socioeconómica, moral y política de los últimos años. El film de Solanas fue programado en el festival de Mar del Plata fuera de concurso y el cineasta recibió de manos de Kirchner un premio Astor de honor a su trayectoria. El director de La hora de los hornos afirmó que pretende con su trabajo “despertar la memoria contra el olvido”, al tiempo que adelantó que está preparando un documental complementario, al que llamará Argentina latente y en el que prevé reflejar “la lucha de los movimientos sociales, las experiencias humanas y la solidaridad que caracterizaron al mismo período”. Solanas explicó que mientras Memoria del saqueo habla del mal uso y del abuso del poder –durante la última dictadura militar y los gobiernos constitucionales de Raúl Alfonsín, Carlos Menem y Fernando de la Rúa–, Argentina latente se referirá a las experiencias de los grupos que en la Argentina de los últimos años lucharon contra la desigualdad y las injusticias. Para el director, Memoria... “es un réquiem acusatorio tras la masacre, después del gran robo; un film de reparación cívica y ética, que pide justicia. Es una obra que pide más democracia –agregó–, porque impulsa a abrir los debates y las investigaciones que todavía no se han hecho”. Solanas señaló que sigue manteniendo “los ideales de un tercer cine, que es un cine por la identidad nacional, de compromiso con la verdad y con una mirada popular y democrática”. Para Solanas, “el género documental ha resurgido mucho en el país a partir de la crisis. Durante los años 90 hubo un gran rechazo al documental y a partir del derrumbe surgió como nunca un cine urgente, un cine piquetero”. El director subrayó que “hacen falta muchas más películas, muchas más investigaciones y ensayos que ayuden a dar respuesta a lo que pasó, porque hay una generación de nuevos directores despolitizados que no quieren reflejar la realidad. No se trata solamente de dar un testimonio político, sino también de ahondar en la realidad”, añadió. El autor de El viaje espera que “la gente acuda a las salas y al ver la película se pueda producir un puente, una cadena, para que esto continúe y, al mismo tiempo, para poder demostrar que un cine de análisis y ensayo es testimonial pero al mismo tiempo es un cine creativo”.