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Mientras se esperaba que los grupos de teatro aéreo y de la “intemperie”, el de fuego y tambores, y otro de murga arribaran al Teatro N/D Ateneo, formando comparsa con los elencos de las veinte obras que integran el ciclo Teatro X la Identidad 2004 (que se ofrecerá a partir del 28 de junio y hasta el 30 de agosto, sólo los lunes a las 20.30, con entrada gratuita, en diez salas de Buenos Aires), varios artistas se encontraban en el foyer, algunos, como el actor Arturo Puig, sosteniendo en la mano el texto que leerían más tarde desde el escenario. El apoyo de los teatristas a esta iniciativa de Abuelas de Plaza de Mayo –nacida en el 2000 con el semimontado A propósito de la duda (con dramaturgia de Patricia Zangaro y dirección de Daniel Fanego)– incluye en esta edición a famosos invitados a cubrir un nuevo formato dentro del ciclo: Espacio Abierto. De ahí la presencia, en el acto de lanzamiento del lunes 21, de Puig, Norma Aleandro, Enrique Pinti y la actriz y cantante Marikena Monti, quien ofreció, junto al pianista Oscar Laiguera, una composición de Jorge de la Vega y otra que incluía letra de Eduardo Galeano. Los otros textos pertenecían a Ariel Barchilón, Jorge Luis Borges (Aleandro seleccionó el cuento “Todo y nada”) y el mismo Pinti, quien, en un aparte con Página/12, opinó sobre Teatro X la Identidad, apuesta sobre la que también se expresó ante este diario el actor Darío Grandinetti, quien actualmente reparte su trabajo entre España y Argentina.
La convocatoria reunió, entre muchos otros, a China Zorrilla, Elena Tasisto, Lidia Catalano, Miriam Martino, Selva Alemán, Claudio Gallardou, Víctor García Peralta, Mario y Salo Pasik, Raúl Mereñuk y Lía Jelín, todos queriendo apoyar con su presencia, o su labor, la búsqueda de Abuelas de los hijos de desaparecidos durante la última dictadura militar que han sido apropiados y viven con la identidad falseada. La actriz Marilú Marini, quien reside en Francia y viene realizando una breve temporada en el Teatro San Martín, fue invitada a leer un testimonio en una próxima función del ciclo: “Siento la necesidad de estar presente en esta convocatoria, porque nos ayuda a tomar conciencia del pasado y de nuestro presente. La actitud de Abuelas revela amplitud de pensamiento. Encuentro en ellas mucha humanidad y una gran libertad para aceptar lo que los artistas están creando”, destaca Marini, en diálogo con este diario, previamente al acto.
Una vez en la sala, y con la comparsa diseminada en la platea, se inició el acto de lanzamiento con el Himno Nacional en la versión de Charly García y el discurso de la vicepresidenta de Abuelas, Rosa T. de Roisinblit, a quien acompañaban en el escenario otras diez abuelas. Luego de referirse a épocas aberrantes de la historia de la humanidad, Roisinblit le puso fecha al inicio de un tramo de la historia argentina: 1976. “Treinta mil personas, entre ellas centenares de niños, fueron secuestrados y hechos desaparecer sin dejar huella”, sintetizó. A partir de allí, su discurso fue el relato de una lucha: “Individualmente, primero, y luego aunadas para reclamar en conjunto, pero igualmente en soledad, desorientadas, sin encontrar formas para buscar a hijos y nietos. Felizmente, poco a poco, fueron acercándose profesionales de la psicología, lo jurídico y genético, y fuimos hallando caminos. Haciendo caminos. Las abuelas saben, desde siempre, que la búsqueda de sus nietos las trasciende en tanto el reencuentro con su descendencia es no sólo un derecho de los familiares sino, ante todo, un derecho de los propios nietos”. Casi a modo de corolario, mencionó el impulso que ha dado Abuelas al Banco Nacional de Datos Genéticos y al Archivo Biológico Familiar. Agradeció el apoyo de distintas comunidades sociales y culturales y el de los integrantes de Teatro X la Identidad. Colaboraciones que dieron por resultado que “centenares de chicos recurran a la Asociación planteandosus casos”, y que los ciclos de teatro se multipliquen, organizándose –como ahora en Madrid y coordinado por el actor Manuel Callau– un programa que se ofrecerá hasta el 3 de julio.
¡Se siente, se siente, están todos presentes!, coreaba la platea a las abuelas, mientras éstas abandonaban el escenario para dar paso a los artistas, y con ello al acto, realizado según una puesta de Gastón Cerana y Pablo Ponce, en el que se incluyó un video producido por éstos y Cristina Fridman. Los organizadores de Teatro X la Identidad quisieron dejar todo en claro. Cerrando el acto se vio a través de un video a la presidenta de Abuelas, Estela B. de Carlotto, quien, desde España, donde se encuentra acompañando el ciclo madrileño, subrayaba el hecho de que “a miles de kilómetros se estaba trabajando por lo mismo”, recordando, además, que en Argentina estaba germinando el relevo. Para demostrarlo, y ya finalizada la transmisión, un grupo de jóvenes, “el relevo”, subió al escenario, abrazándose.