ESPECTáCULOS
Tablas y revolución
El Periférico de Objetos surge en 1989 y se da a conocer al año siguiente con la versión titiritera de Ubú Rey, de Alfred Jarry. Veronese escribió, entre otras obras –muchas de ellas, en coautoría con Emilio García Wehbi–, Cámara Gesell, Circonegro y El suicidio, hasta el momento, su último estreno. Desde sus comienzos, el grupo se distinguió a partir de la utilización, a modo de personajes protagónicos, de antiguas muñecas de porcelana o similar, las cuales solían aparecer en escena con las cuencas de los ojos vacías y las articulaciones al descubierto. Luego de varios espectáculos, estas siniestras presencias se convirtieron en una de las marcas estilísticas del grupo. Asimismo, en un principio sus montajes tenían lugar en espacios no convencionales con una capacidad de espectadores limitada. En la exitosa Máquina Hamlet (sobre el texto homónimo del alemán Heiner Müller), la utilización de maniquíes en escena los vinculó de un modo aún más explícito a la estética teatral del polaco Tadeusz Kantor. Sobre su trabajo junto a El Periférico, Veronese escribió: “Hago teatro para hacer visible lo que culturalmente de ninguna forma y bajo ningún pretexto puede serlo. El resultado tiene algo de revolución: lo que se verá será doblemente visible, ya que ese hecho se alumbra por sobre el resto de lo escenificado sólo por estar en el lugar inadecuado. Esa es mi cuestión, la que con más interés me mueve a realizar escritura en el teatro”.