ESPECTáCULOS › HORACIO MALVICINO
Legado de sabiduría
A Astor no lo tenemos físicamente, pero sí tenemos su alma, porque su música sigue viva y él es un referente indiscutido en el mundo. El marcó un camino a los que lo siguieron. Sirvió y sir-ve de ejemplo para muchos, y es más que significativa la cantidad de grupos que hoy toman su mú-sica. Eso permite que el tango siga vivo en la Argentina y en el mundo. Recuerdo perfectamente el año ‘54, cuando logré cumplir dos de mis sueños dorados: tocar junto a Piazzolla y conocer a otro de mis ídolos, Leopoldo Federi-co. Además de su amistad, Astor me dejó un legado de sabiduría.