Tres docenas de skinheads fueron detenidos el último domingo, minutos antes de que dieran inicio a un festival en conmemoración por el 120º aniversario del nacimiento de Adolf Hitler. Los 36 “cabezas rapadas” neonazis habían sido convocados por la organización internacional racista Blood and Honour (Sangre y Honor) a través de una página web española. Producto de una investigación iniciada hace varios meses por la Unidad de Investigación de Conductas Discriminatorias (UICD) de la Policía Federal, “se pudo dar con el lugar del recital y enmarcar las detenciones dentro del delito de violación de la ley 23.592, que penaliza los actos discriminatorios”, confirmó a Página/12 el comisario Carlos Sucatti, responsable del operativo policial efectuado en el Club Central Argentino de la localidad bonaerense de San Martín.

“El procedimiento es un importante logro en la lucha para erradicar esta nefasta ideología. Pero también se hace esencial que ante hechos similares reaccione toda la sociedad argentina y no solamente la comunida judía”, reconoció Aldo Donzis, presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA). El operativo policial, en realidad, se inició en diciembre de 2008 a raíz de una presentación judicial que interpuso la DAIA para que “se actuara sobre los pasos y las acciones de estos grupos de skinheads”, relató Donzis. Porque, según el titular de la entidad judía, los “neonazis” argentinos tienen una estrecha relación con grupos racistas “de otros lugares del mundo, sobre todo de países como Chile y Brasil, pero también europeos”.

A las 19 del domingo, la UICD allanó el local del Club Central Argentino. En uno de los salones de la entidad deportiva de la localidad de San Martín estaba todo dispuesto para que tocaran dos bandas neonazis (“Arrevato 88” –el nombre remite por su doble numeración a las letras “HH” del saludo nazi “Heil Hitler”– y “Varvarian”) para conmemorar el nacimiento del principal responsable del Holocausto. El público presente era extremadamente reducido: sólo 36 skinheads estaban presentes. Número coincidente con las detenciones policiales.

“Había propaganda nazi por todo el lugar –relató el comisario Sucatti–. Banderas con la cruz esvástica, material fílmico y música grabada con alto contenido discriminatorio y antisemita. También secuestramos armas blancas, gases irritantes y varias manoplas con las que agreden a homosexuales y personas de otras nacionalidades.” “A los responsables del club, el juez federal sólo les tomó declaración como testigos. Porque la pobre gente, aunque estaba presente en el lugar, desconocía por completo la naturaleza del acto”, aseguró a este medio Sucatti.

Las detenciones del domingo estuvieron íntimamente relacionadas con un hecho ocurrido el 21 de diciembre pasado. En ese momento, la policía detuvo a 25 personas que participaban de un homenaje al capitán del acorazado “Graf Spee”, enterrado en el Cementerio Alemán del barrio porteño de Chacarita. También en aquella “conmemoración” los skinheads se manifestaron con banderas y saludos “claramente racistas. En ambos hechos, la mayoría de los detenidos fueron las mismas personas, confirmó el uniformado. De hecho, el operativo del domingo fue producto de una investigación de la UICD iniciada con el allanamiento en el cementerio.

En los dos actos, los skinheads fueron liberados porque el delito de discriminación es excarcelable. Sin embargo, la semana pasada empezaron los preparativos judiciales para elevar a juicio oral y público la causa por la conmemoración del capitán del “Graf Spee”: “El nuevo acto de discriminación del domingo pasado servirá como agravante. Por lo tanto, los skinheads se están exponiendo a que los condenen a un máximo de tres años de prisión”, aseveró el comisario.

También ayer, la DAIA denunció que fue profanado con inscripciones nazis el cementerio judío de Liniers. “Se inscribe en un mismo patrón ideológico, aunque aún desconocemos si los responsables tienen vinculación con los skinheads detenidos el domingo”, concluyó el uniformado.

Informe: Mariana Seghezzo.