La ministra de la Corte Suprema Elena Highton de Nolasco rechazó ayer las palabras de disculpa del vocal decano de la corte tucumana, René Mario Goane, luego de sus expresiones machistas sobre la presencia de las mujeres en la Justicia. “No son una retractación”, consideró la jueza del máximo tribunal del país en declaraciones a Página/12. Además, Highton señaló que a Goane “le falta concientización y sensibilización en la temática de género”.

–¿Le parecieron discriminatorias las declaraciones de Goane en las que adjudicó la baja productividad en los juzgados a la creciente incorporación de mujeres en el Poder Judicial? –le preguntó este diario.

–Por supuesto –respondió.

La ministra mantuvo un breve diálogo con este diario al término de su exposición en el IV Encuentro de Operadores de Justicia de América latina sobre “Derechos Humanos, Justicia y Género” que se inauguró ayer en la Facultad de Derecho de la UBA, con la presencia de la decana Mónica Pinto y la ex jueza de la Corte Interamericana de Derechos Humanos Cecilia Medina, entre otras referentes del ámbito jurídico regional.

Durante su ponencia, Highton hizo referencia a los dichos de Goane, cuando se refirió al programa de sensibilización para incorporar la perspectiva de género en los tribunales que promueve la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema, creada por Carmen Argibay. Higthon señaló que el juez tucumano dijo “palabras muy despectivas de las mujeres” y apuntó que “cuanto más alto (es el cargo) más hace falta” que participen del curso, que apunta a desterrar la discriminación hacia las mujeres en la Justicia y está dirigido a magistrados y personal administrativo.

La corte tucumana decidió intervenir. Para mañana, su presidente, Antonio Estofán, convocó a una reunión al alto tribunal a la titular de la delegación local del Inadi, Teresa Ivankow, y a las representantes del Comité de América latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer. Cladem denunció a Goane ante el Inadi. A partir de esa presentación, desde el organismo pidieron el viernes a la corte tucumana que se expidiera sobre las declaraciones del vocal decano. Tanto Cladem como Ivankow rechazaron el contenido de la carta de Goane en la que ensayó un pedido de disculpas, al evaluar que “no constituyen una rectificación de sus dichos”. Ivankow indicó que el organismo espera que la corte provincial fije públicamente su posición en relación a la incorporación de la perspectiva de género en la Justicia.

En una carta difundida el viernes, Goane dice que “las repercusiones que tuvieron las manifestaciones efectuadas por mi parte en la entrevista publicada en el diario La Gaceta del día sábado 21 del corriente me persuaden indubitablemente de que medió una desafortunada proposición verbal de mi idea y, por lo tanto, pido públicas disculpas a quienes pudieren haberse sentido agraviados por el malentendido”. En un comunicado de prensa, Cladem advirtió ayer que Goane “evita referirse a las mujeres; emplea, en cambio, el género masculino cuando refiere a ‘quienes pudieren haberse sentido agraviados’”. Además, dice la entidad, en cierto pasaje clave de su carta consigna que “medió una desafortunada proposición verbal de mi idea”, dando a entender que “algo de naturaleza desconocida se interpuso entre sus intenciones y lo que quedó registrado, operación mediante la cual, pensamos, el magistrado trata de manera retorcida de atenuar su responsabilidad”. “Asimismo –agrega–, en el último párrafo de su carta, el juez dice: ‘Contrariamente a lo que la equívoca expresión verbal de marras ha suscitado (...)’; tratando, con este tono impersonal, de tomar distancia de sus dichos como si la mencionada ‘expresión verbal’ se hubiese manifestado por sí misma.”

Cladem entendió que el vocal decano de la corte “elude hacerse cargo de sus dichos y de ese modo no logra la contundencia que debe tener una retractación, sobre todo cuando se atacó y discriminó alevosamente a un determinado grupo”.

Los dichos de Goane despertaron repudios de diversos ámbitos, entre ellos, de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, que recordó que en 2008 dictaminó que el juez está “inhabilitado éticamente” para su cargo por su “acreditada participación en organismos de poder” durante la dictadura en la provincia.