Cuarenta y siete cámaras ya monitorean los movimientos de la gente en seis terminales de trenes y en la estación central de ómnibus de Retiro de la ciudad de Buenos Aires, en el marco de un programa de alerta y vigilancia temprana que puso en marcha la Policía Federal, que ya detectó unos veinte ilícitos en 15 días. El sistema fue inaugurado ayer en forma oficial por la ministra de Seguridad de la Nación, Nilda Garré, quien, acompañada por el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, adelantó que estas mismas cámaras, que permiten obtener imágenes en colores y de alta definición, “se instalarán en 400 puntos de la zona sur porteña” para detectar ilícitos.

Siete monitores reflejan las imágenes a través de seis cámaras instaladas en la estación Lacroze del Ferrocarril Urquiza, siete en Plaza Constitución del Roca, ocho en Once de la línea Sarmiento, cinco en Retiro de la línea Belgrano Norte, seis en el ferrocarril Mitre y otras cinco del San Martín, ambas de Retiro.

También fueron instaladas nueve cámaras en la terminal de ómnibus de Retiro, que reflejan no sólo los movimientos dentro de la terminal, sino también en las adyacencias y en el ingreso a la Villa 31. “Estamos entregando los elementos más modernos a la Policía Federal, son herramientas muy importantes en la detección de delincuentes y tienen como fin darles seguridad a los habitantes. Son parte de un proceso que se va a ir extendiendo a otras áreas”, destacó Garré.

El sistema de cámaras continuará con la instalación, en los próximos 20 a 30 días, de seis cámaras en cada una de las estaciones del ferrocarril Belgrano Sur que pasa por el barrio de Pompeya y cuatro en la línea Mitre que va desde Lisandro de la Torre hasta Núñez. También se instalarán cinco en la estación Liniers, mientras que también se proyectan colocar cámaras a lo largo del ramal.

“Las cámaras monitorean y cuando detectan algo sospechoso se avisa en forma inmediata al personal de calle para que eventualmente detenga al delincuente”, dijo Garré, quien agregó que “esto también sirve para que, cuando se detecta un problema de salud en alguna persona, se pueda llamar en forma inmediata a una ambulancia”.

La ministra destacó, además, que todo el material filmado “queda grabado y se lo puede utilizar como elemento de prueba en causas judiciales”. “Este es el mismo sistema de cámaras que posee México, cuyo índice delictual es mucho más alto que el nuestro”, y añadió que “instalaremos las mismas cámaras en 400 puntos de la zona sur de la Ciudad, para lo cual estamos en el proceso de tendido de 300 kilómetros de fibra óptica, necesarios para tener la misma fidelidad de imagen”.

La funcionará explicó que las cámaras “se van a complementar con las de la Policía Metropolitana y tendrán un efecto disuasivo, ya que el que está por cometer un delito sabrá que se lo está filmando”. “Sabemos que no son mágicas, que no van a erradicar el delito, pero servirán para prevenir y tener una intervención más rápida”, dijo Garré.

Ocho agentes monitorean las cámaras por turnos con un protocolo de acción que les indica cuáles son los horarios y los sectores con más probabilidades de que ocurran ilícitos, las edades de las personas que con más frecuencia los cometen y qué tipo de hechos se dan en determinadas zonas. “De esta forma los agentes enfocan su atención más específica en esos lugares y cuando detectan algo sospechoso accionan por control remoto la cámara o el zoom y avisan al personal de calle para que intervenga”, precisó una fuente policial.

El sistema se puso en marcha el 14 de septiembre pasado y en 15 días logró detectar unos veinte delitos, una similar cantidad de personas con problemas de salud y ubicó a dos personas que tenían pedido de paradero. “Antes teníamos unas cámaras de muy pobre definición que ni siquiera podíamos hacer girar o accionar por el control remoto, eran fijas. Este es un adelanto muy importante para prevenir el delito”, detalló la fuente.