Carlos Varela Alvarez, abogado querellante en el juicio oral por el caso de María de los Angeles “Marita” Verón, estimó ayer que habrá un segundo debate en los tribunales de Tucumán para los “mencionados” en el actual proceso como parte de la “trama política, judicial y policial” de sometimiento a la prostitución de la joven.

“Habrá un segundo juicio y apuntamos a que lleguen al banquillo todos aquellos que fueron mencionados en la trama política, judicial y policial”, enfatizó Varela Alvarez. Además, el letrado recordó que la madre de la víctima, Susana Trimarco, denunció en el juicio que recibió “pistas falsas” sobre el paradero de su hija de parte de los gobiernos tucumano y riojano de los ex mandatarios Julio Miranda y Angel Mazza.

Según la etapa sumarial, la desaparecida Marita fue secuestrada el 3 de abril de 2002, cuando tenía 23 años, y fue entregada luego a una red de trata de personas.

El expediente del caso tuvo 25 imputados al principio, pero la Justicia de Tucumán sobreseyó a 12 de los acusados, tras lo cual la querella consiguió la intervención de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Asimismo, el máximo tribunal de Justicia del país ordenó que se realizara el juicio oral con 13 imputados, pero estableció que la Cámara de Apelaciones en lo Penal revisara otra vez la situación de los acusados que obtuvieron los sobreseimientos y dictara un nuevo fallo. “Fueron desvinculados en primera instancia por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, pero se sigue investigando”, advirtió Varela Alvarez.

Por su parte, Susana Trimarco, madre de Marita Verón, reanudará su declaración en la sexta audiencia del juicio oral que se realiza en Tucumán, luego del cuarto intermedio dispuesto por la Justicia tucumana en el marco de los feriados nacionales por Carnaval.

La madre de Verón señaló que desde que comenzó a participar de las audiencias en tribunales “allí los tiene sentados a todos esos delincuentes que destruyeron la vida de su hija y de su familia”.

“Dios los hará pagar por todo lo que hicieron”, sostuvo Trimarco en un mensaje que difundió por redes sociales de Internet.

Además, remarcó que “de la justicia divina de Dios nadie se salva. La verdad es una sola, que te llena de paz y libertad, eso es lo que yo tengo en este momento, gracias a Dios”.

“Durante diez años de lucha esperé este momento. Quiero la verdad y justicia por mi hija”, exclamó en su mensaje la madre de Marita Verón.

De los trece imputados en la causa, María Jesús Rivero, dueña de la remisería sospechada del secuestro, su hermano Víctor Angel Rivero y Natalia Daniela Milhein, ex pareja del dirigente futbolístico Rubén “Chancha” Ale, quien a su vez fue esposo de la empresaria remisera, fueron los únicos que hablaron ante los jueces y negaron los cargos que se les imputan.

Los testimonios de las mujeres y los de Trimarco sirvieron para exponer en los tribunales la existencia de prostíbulos con conexiones interprovinciales y redes de trata de personas que pudieron operar bajo el amparo de gobiernos y autoridades judiciales y policiales.